Aunque quizás desconocido, las carreteras representan una seria amenaza para la vida silvestre, particularmente para las aves. Así lo demuestran numerosos informes y el estudio de varios lustros que ha desarrollado en buena parte de Almería los investigadores de la Estación Experimental de Zonas Áridas (EEZA) de Almería. De ellos se desprende que las colisiones de aves con vehículos en circulación son una de las principales causas de mortalidad para estas especies.

Más de 420 especies de aves en Europa se ven significativamente afectadas por atropellos en carreteras, con la península Ibérica destacándose como una de las áreas con mayor concentración de estos incidentes. En este contexto, se insta a los países a identificar los “segmentos diana” en sus redes de carreteras, donde se concentran las colisiones, especialmente de especies valiosas para la conservación, con el fin de implementar medidas que mitiguen estas pérdidas.

Tras 20 años de estudio sobre la biodiversidad en la comarca del Campo de Tabernas, se llegó a la determinación de que uno de estos “segmentos diana” identificados es el puente en la carretera A‐1100, aproximadamente a 2,4 kilómetros de la localidad de Uleila del Campo. Este puente alberga regularmente nidos de varias especies de aves, incluidas algunas en peligro, como la carraca y el cernícalo primilla. La presencia de estas aves ha sido observada en el último año, según datos recopilados en el documento elaborado por la Estación Experimental de Zonas Áridas.

La instalación de pantallas anticolisión fue planteada por parte del equipo de investigación de Francisco Valera, enviando en 2022 un informe técnico EEZA a la Junta de Andalucía para alertar sobre esta situación alarmante, y proponiendo diversas alternativas para la construcción de una pantalla anticolisión de aves en ese punto caliente. Sin embargo, se señalaba que la elección del tipo de pantalla era crucial. Mientras que las pantallas vegetales son recomendadas en muchos casos, en este puente en particular no eran viables debido a la estructura del mismo.

Las pantallas de cristal también se desecharon, porque aunque han sido consideradas en el pasado, se han demostrado ineficaces e incluso peligrosas para las aves, ya que pueden ser confundidas con el entorno y causar colisiones mortales.

Como consecuencia de un informe técnico presentado la administración regional, en diciembre de 2023, la Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda tomó medidas concretas para abordar el problema identificado. Fue en respuesta a la recomendación de instalar una pantalla anticolisión para aves en el lugar identificado, así que se llevó a cabo la construcción de dicha pantalla.