Harley Davidson, una familia de atronador y auténtico corazón

"Subir en una moto de éstas es excitante". Éstas eran las palabras de Inma Escobar, la única mujer del club HDC de Almería, que cuenta con 13 miembros. Pero, ¿qué es HDC? Pues el Harley Davidson Club. Cuenta con 14 sedes repartidas por toda España, lo que implica que a lo largo del año se realizan 14 concentraciones, una en cada sede. El fin de semana del 23, 24 y 25 de septiembre fue HDC Almería quien organizó el encuentro motorístico. Al mismo asistieron cerca de 100 personas repartidas en unas 80 motos, todas ellas Harleys, aunque a la reunión también asistieron otras no harleys.

Motoristas de todas partes de España (Murcia, Castilla y León, Mallorca, Cantabria, Teruel, Málaga, Alicante, Guadalajara...) no quisieron perderse tal evento y lucieron sus parches, sus chalecos de cuero, sus vaqueros y sus botas en Almería durante los tres días que duró en encuentro. Rutas, comidas, fiestas, streaptease, conciertos y juegos se realizan a lo largo de estos días de convivencia.

Un parche refleja su pertenencia a la Federación Española. También llevan uno de HDC y otro con el sitio de pertenencia. Además, para poder llevar el parche de HDC existen una serie de requisitos. "Para entrar al club lo primero es tener una harley, tener carné y ser mayor de edad. Pero con esto, no basta. A diferencia del HOC, para entrar en HDC tienes que pasar un tiempo de convivencia durante el cual eres aspirante. Tras y ese tiempo, y si así lo deciden los componentes por unanimidad, pasas a ser miembro", explica Jesús Calderón, presidente de HDC Almería.

Una vez dentro, es una gran familia. "Si uno se marcha a Alicante de viaje, el club HDC de allí les atenderá en todo lo que necesiten", prosigue Jesús. "Es como una hermandad", sentencia. Cuidan todos de todos, incluso encima de las motos. "Sobre ella hay que cuidar que no pase nada. Nos cuidamos entre todos. Cuando una chica lleva una moto se vuelcan todo con ella y tratan de ir a su ritmo. Ser miembro es como pertenecer a una familia. El tópico de que los motoristas son rudos no es cierto, explica Inma, dueña de una Harley Sporter 1200cc.

Alrededor de éstos, hay mucha gente que no es miembro como tal pero que acuden a los encuentros. Se les llama hand a round.

Los miembros de un club procuran reunirse todos los fines de semana y pasado una determinado tiempo, organizan encuentros nacionales. "La Federación procura siempre mandar representantes de los diferentes clubs", afirma Jesús. Con una familia así da gusto.