El IBI más caro de Andalucía

Almería tendrá el precio del pan más barato de toda España, pero los contribuyentes de la capital llevan años ingiriendo como pueden los recibos del IBI, uno de los impuesto de mayor impacto en los bolsillos de las familias. Un informe elaborado por el Colegio Oficial de Arquitectos de Almería viene a corroborar que la capital almeriense sufre unos valores catastrales sobredimensionados y muy alejados al actual valor de mercado de las viviendas que la colocan en la primera posición en el listado andaluz y en cuarto lugar de las ciudades con la contribución más cara de España, muy por encima incluso de Madrid, Barcelona y San Sebastián.

La b ase para calcular el recibo del IBI que emiten los ayuntamientos son los valores catastrales fijados por la Dirección General, que también le sirven a la Junta de Andalucía a la hora de calcular el valor real de determinados bienes inmuebles urbanos a efectos de la liquidación de los impuestos de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos que la Administración andaluza recauda mediante la aplicación de un coeficiente que cada año, desde 2007, revisa.

El Colegio de Arquitectos ha recibido de la Consejería de Hacienda y Administración Pública una notificación fechada el 22 de abril, mediante la cual traslada el proyecto de orden por la que se aprueban los coeficientes aplicables al valor catastral. Fija para Almería un coeficiente del 1,24. Pendiente de aprobación, los arquitectos advierten de que esta revisión supone un incremento del 24% sobre el valor catastral, al cual se oponen. El decano , Javier Hidalgo, ha anunciado que el Colegio está redactando un escrito en contra de dicha subida, que refuerzan con el mencionado informe en el que los arquitectos cruzan datos de gran relevancia que ponen de manifiesto que el valor que las administraciones le dan a los inmuebles a la hora de recaudar está muy alejado del valor del mercado. Dichas diferencias de valoración entre la realidad y lo que determinan las normas se ha acrecentado por la crisis económica que ha provocado una bajada en picado de los precios.

El informe de los arquitectos recoge el precio del metro cuadrado de las viviendas ha descendido en Almería desde 2007 un 34,48%, por encima de la media andaluza situada en un 33,78%, pasando de 1.868 a 1.224 euros. Sin embargo, los valores catastrales empleados no se ajustan a esta nueva realidad desde hace años y se mantienen ajenos al incremento de familias en paro, otro de los índices que destaca el Colegio de Arquitectos que hace ver cómo ciudades como Madrid, Barcelona o San Sebastián, donde el precio de venta del metro cuadrado es muy superior al de Almería y donde la tasa de desempleo es inferior, tienen un valor catastral asignado muy por debajo al de Almería por lo que pagan a sus ayuntamientos y comunidades menos impuestos. "La vivienda es un derecho básico reconocido en la Constitución y en Andalucía se está penalizando. No se puede convertir la vivienda en un artículo de lujo. No hay derecho de que Pamplona tenga los valores más bajos y Almería se encuentre en la cuarta posición", critica Hidalgo.

A la espera de una actualización catastral justa, los arquitectos pretenden que las administraciones públicas bajen los tipos impositivos para equilibrar la balanza. Le proponen en concreto a la Junta de Andalucía que en lugar de subir su coeficiente al 1,24 lo baje hasta el 0,6 con el que, según los cálculos de este colectivo de profesionales, vendría a corregirse el desfase acumulado entre los valores de mercado y los valores catastrales. "Lo contrario -señalan en su informe- es claramente denunciable públicamente, llegándose al convencimiento de que esa imposición atenta contra la ciudadanía, lo que evidencia un principio denunciable ante el poder judicial". De hecho, llegan a calificar el coeficiente propuesto por la Consejería de Hacienda de "estafa".

Los arquitectos utilizan este calificativo justificado por la legalidad vigente por la que, recuerdan, "el valor catastral no puede superar nunca el 50% del valor del mercado, algo que está ocurriendo y que este coeficiente agrava. No todo tiene que ser subir, también se puede bajar", considera el Colegio Oficial.

"Si aplicamos el criterio objetivo de que el valor catastral es como máximo el 50% del valor de mercado, resultan coeficientes estimativos que se indican en la tabla (3) para viviendas libres, lejos de los coeficientes que propone la administración autonómica", defiende Javier Hidalgo.