Guantes, pantalla facial, mascarilla, desinfectante de manos, distancia de seguridad y puntualidad. Ese es el protocolo estricto que sigue Iván Sánchez, el encargado de llevar la comida a las casas de casi medio centenar de personas mayores que viven en la comarca del Poniente y en Almería capital a los que en estos días de confinamiento la Junta de Andalucía les garantiza los menús que antes de esta situación degustaban en los Centros de Participación Activa.

Son usuarios de la Tarjeta Andalucía Junta ‘sesentaycinco’ en su modalidad Oro y hasta el decreto del estado de alarma comían de lunes a viernes junto a otros mayores en estos centros de titularidad del gobierno andaluz. Con el cierre de las instalaciones, por motivos de seguridad y prevención ante el contagio de la COVID-19, estos mayores se vieron privados de un servicio que para ellos es imprescindible.

La Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación Familiar tramitó de urgencia en los primeros días del estado de alarma la contratación de una empresa de catering y de reparto que pudiera suministrarle a domicilio los alimentos y así poder seguir prestando este servicio esencial para un colectivo especialmente vulnerable. Y es que se trata de personas mayores de 65 años, algunas incluso poco les falta para llegar a los 90 años, que de la noche a la mañana se vieron envueltos en una situación extrema que debían afrontar y para la que no tenían recursos.

Iván Sánchez es el encargado de repartir parte de los menús a los mayores de la provincia de Almería

En Almería son en total 282 las personas mayores que tienen concedida la Tarjeta Andalucía Junta ‘sesentaycinco’ en la modalidad Oro y 98 los usuarios que comían en los comedores de los centros. Viven en distintas partes de la provincia pero la distancia entre un municipio y otro no ha sido un handicap a la hora de hacer el reparto.

Iván Sánchez y su hermano Carlos Sánchez recorren toda la geografía almeriense hasta completar la ruta con el último hogar, desde Almería capital hasta Chercos, Dalías, El Ejido, Fiñana, Huércal de Almería, Viator, Roquetas de Mar, Rágol, Níjar y Macael. El mismo recorrido lo hacen dos veces en semana para entregar los menús saludables que prepara el Mediterránea Catering en la provincia de Málaga y que llega a Almería y al resto de provincias de Andalucía oriental en camiones refrigerados de la empresa Just Fresh en perfectas condiciones para ser entregados a sus destinatarios. Iván asegura que ya ha cogido aprecio a estos mayores, pues la mayoría ya lo tratan como si lo conocieran de toda la vida.

De ruta por el barrio de las 500 Viviendas de la capital 

Diario de Almería, con todos los protocolos de seguridad para salvaguardar la salud de estas personas mayores, ha acompañado a la empresa de reparto Just Fresh durante la ruta de la capital, concretamente en el barrio de las 500 Viviendas de la capital almeriense. Dolores González, de 81 años; Encarna Moreno, de 77 años y María Asunción Lara, también de 77 años, reciben con ilusión al repartidor y aseguran que para ellas el verlo cada mañana llegar con la bolsa de la comida es “una alegría”, no solo por los alimentos que les proporciona, sino también porque la visita, aunque breve y a una distancia de seguridad sin pasar del rellano de acceso a la vivienda, es algo “que se ha convertido en una rutina y cada mañana esperamos como si se tratara de la visita de un familiar o alguien allegado”.

María Asunción Lara recibe el menú para dos días en su domicilio de las 500 Viviendas de la capital almeriense

Dolores González, Encarna Moreno y María Asunción Lara son mayores de 70 años que a diario acudían a comer al Hogar I y que al decretarse el cierre de los Centros de Participación Activa temieron quedarse sin ese servicio, por lo que agradecen el esfuerzo que está haciendo la Junta de Andalucía para llevarle los alimentos diarios a casa

Dolores González, de 81 años, recibe con alegría cada día sus alimentos a domicilio

Dolores González asegura que está “muy contenta con este servicio, sobre todo porque la comida está muy buena y porque me ha permitido tener apaño en casa sin tener que pisar la calle para ir a comprar desde que llegó el coronavirus”. Antes acudía de lunes a viernes a comer al Hogar I, el Centro de Participación Activa que está a pocos metros de su casa. Encarna Moreno, que vive sola aunque tiene cuatro hijos, echa mucho de menos el ir al centro a comer porque asegura “era una forma de divertirme, de compartir con el resto de personas y de vivir unas horas de alegría; tengo ya muchas ganas de que todo vuelva a la normalidad”. Y María Asunción Lara, agradece cada día al repartidor su esfuerzo por llevarle la comida y en ocasiones incluso le da una simbólica propina que no se toma bien si es rechazada, aunque sea un caramelo.

Para Iván Sánchez, el repartidor, “es una satisfacción realizar este trabajo que se le ha encomendado, sobre todo por la buena labor que sabe que se está haciendo”

Con todos los beneficiarios de este servicio se ha contactado previamente para realiza el reparto y para fijar un horario de entrega.

La consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, destaca el esfuerzo de su departamento para seguir trabajando por dar la mayor cobertura posible a las personas mayores por ser uno de los colectivos más vulnerables a la pandemia actual de la COVID-19: “Ellos y ellas nos han dado la vida y el futuro y nuestra responsabilidad hacia estas personas es total. Vamos a cuidarlos como siempre pero más que nunca porque, ahora mismo, son nuestro punto más importante de atención”.

El delegado territorial de Igualdad en Almería, Antonio Jiménez, hace hincapié que “ante una situación excepcional, la Consejería ha reaccionado a tiempo y ha tomado las medidas necesarias para garantizar la calidad de vida de nuestros mayores”.

El cierre de los Centros de Participación Activa, 16 en la provincia de Almería de titularidad de la Junta de Andalucía, fue una decisión determinante para evitar contagios en la población mayor. El Gobierno andaluz comenzó a tomar medidas de calado para la protección de la población incluso antes de que el Gobierno central declarase el estado de alarma. Con la contratación de varias empresas de catering casi de forma inmediata para dar servicio a toda la comunidad, se ha conseguido seguir prestando un servicio de primera necesidad a estos mayores que, además, se encuentran en una situación económica delicada.

Tras el cese de la actividad en estos centros a causa de la crisis del coronavirus, se ha garantizado la distribución de la comida de forma gratuita (antes bonificada un 50%) en su domicilio para las más de 1.700 personas mayores de toda Andalucía titulares de la Tarjeta Andalucía Junta 'sesentaycinco' en su modalidad Oro, que además son socios de los Centros de Participación Activa, donde recibían estas comidas. La Consejería ha planteado la necesidad inaplazable de que se mantenga el servicio a estas personas que se encuentran en una precaria situación económica y a quienes se les servía el almuerzo de lunes a viernes de forma presencial en los llamados centros de día con servicio de comedor.