Respetan al PSOE, pero lo quieren de su lado
PP, Podemos y Ciudadanos no se mojan tras el debate pero seducen al futuro ganador para lograr sus objetivos
En el resto de partidos hay, al menos, un consenso sobre las primarias del PSOE. PP, Podemos y Ciudadanos insistieron ayer en mostrar respeto al proceso interno en el que están inmersos los socialistas. También están de acuerdo en el resto de fueras en la importancia que tiene el partido del puño y la rosa para el país, pero todos quieren que el PSOE que salga de la votación del domingo se acerque más a cada una de sus posiciones.
"Hemos respetado siempre el proceso interno del PSOE. Han decidido hacer un debate y lo respetamos. Respetamos cualquier decisión que se adopte", dijo el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, desde Pekín, donde participa en un foro económico. El jefe del Ejecutivo central pidió "responsabilidad y seriedad" a los socialistas para que sean "capaces de estar a la altura de las circunstancias y no en estas cosas de que ahora pido la dimisión o le pongo una moción de censura que va a tener los efectos que todo el mundo conoce".
A la misma hora del debate, Albert Rivera, habló del "problema del PSOE". Según el líder de Ciudadanos, la disyuntiva está en si los socialistas que ganen construirán una fuerza que sea capaz "de modernizarse y abrirse a las políticas liberales y modernas del siglo XXI" o si "va a seguir afincado en el discurso de la vieja izquierda".
Justo desde ese lado del espectro ideológico, Íñigo Errejón pidió a los socialistas que salgan de su "ensimismamiento". El secretario de Análisis Estratégico de Podemos, llamó al PSOE a "sumar fuerzas", sea quien sea el ganador de sus primarias, y todo para "sacar al PP, que se comporta como una mafia". No es que Podemos "esté de acuerdo en todo" con los socialistas, dijo Errejón, pero hay una "urgencia democrática".
Desde Andalucía también hubo palabras para el PSOE. El presidente regional del PP, Juanma Moreno, recordó a Susana Díaz que si pierde quedará "inhabilitada" para seguir siendo presidenta de la Junta de Andalucía. Los andaluces, aseguró Moreno, no son un "premio de consolación" y, por tanto, Díaz no puede mantenerse al frente de la Junta tras haber "jugado porque le ha interesado".
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