Tráfico celebra su medio siglo de vida reconociendo a sus trabajadores
L 50º aniversario de la DGT
El 30 de julio de 1959 se aprobaba la Ley 47/1959 con la que daba comienzo la andadura de la DGT en Almería · El Jefe Provincial de Tráfico, José María Méndez, "orgulloso" anfitrión
La celebración del 50º aniversario de la Dirección General de Tráfico en Almería tuvo ayer en la Subdelegación del Gobierno su primer acto conmemorativo con la organización de un acto al que asistieron, entre otros, el Jefe Provincial de Tráfico, José María Méndez, y el Subdelegado del Gobierno en Almería, Andrés Heras, además del Jefe del Subsector de Tráfico de Guardia Civil en la provincia, el Capitán Gonzalo Gutiérrez.
Durante la exposición, los ponentes destacaron la importancia que ha supuesto para la sociedad el duro trabajo tanto de la propia DGT como de la Guardia Civil de Tráfico a lo largo de estos años en los que, con su labor, la siniestralidad en carretera se está viendo reducida hasta unos niveles jamás vistos desde 1964, cuando había un volumen total de coches casi 30 veces inferior al actual.
José María Méndez quiso, en este sentido, reconocer la labor de todas y cada una de las personas que han trabajado en pos de garantizar un mejor servicio al ciudadano en carretera recordando algunos de los hitos nacionales y provinciales que marcan la historia del automóvil en España, como fue la primera matriculación realizada en Almería, el 20 de diciembre de 1907, a un coche de la marca Aries. Además, destacó la importancia que tuvo el primer código civil de Tráfico en 1934, que estuvo vigente hasta la Ley de Seguridad Vial, aprobada por el Gobierno de Felipe González en 1990 teniendo, y entre medias, la Ley 47/1959 de 30 de julio, es decir, la creación de la entonces denominada Jefatura Central de Tráfico, la actual DGT. Fue la Ley de 1990 la que, para Méndez, "supuso el gran impulso que permitió desarrollar toda la normativa que el momento requería, sustituyendo al Código de Circulación de 1934, totalmente obsoleto en muchos aspectos". Además, destacó que "puso en marcha determinadas disposiciones como fueron la obligatoriedad del uso del cinturón de seguridad de los vehículos y del casco en los de dos ruedas".
Por otra parte, el Jefe Provincial de Tráfico hizo especial hincapié en la importancia de las mejoras introducidas a lo largo de estos cincuenta años donde el trinomio vía-vehículo-factor humano se ha convertido en algo frecuente, recordando, a través del visionado de un vídeo preparado para la ocasión, que en los años 60 tener un coche era algo lujoso y que actualmente casi todo el mundo puede acceder a un automóvil y al permiso de conducir, como demuestra que se haya pasado de 2,2 millones de licencias a comienzos de la década yé-yé a los 25,5 que están vigentes en 2009.
Méndez también quiso "reconocer la labor de todos los funcionarios y personal laboral de la DGT que han puesto su granito de arena para poder dar cada día un mejor servicio a todos los ciudadanos".
Por su parte, el Capitán Gonzalo Gutiérrez quiso honorar especialmente a sus 5 compañeros del Cuerpo de Guardia Civil de Tráfico fallecidos en acto de servicio en la provincia de Almería desde su creación, así como a todas las personas que han contribuido a hacer del mismo una garantía de orden cívico en las carreteras españolas. Además, quiso recordar todas las dificultades y precariedades por las que pasó el cuerpo en sus inicios, al tiempo que hizo una mención expresa a los comienzos del Cuerpo en la provincia con la apertura de las primeras delegaciones en Vera, Berja y Tíjola. En este sentido, Gutiérrez reconoció el "orgullo" que tienen todos y cada uno de los miembros de este grupo especial de la Guardia Civil "por su pertenencia y por la relevancia de su trabajo" desde que, en 1959, con un total de 560 agentes, comenzaran a patrullar las carreteras, y así hasta hoy día en que son más de 10.000 trabajando y velando diariamente por la seguridad de los españoles al volante.
También se hizo constar la importancia que tiene la labor de prevención de accidentes a través de unas medidas, que si bien se pueden considerar impopulares, han concienciado a la población y han logrado un descenso prolongado en los números de siniestralidad por accidentes de tráfico. En esta línea, destacaron el papel de los más de 433.000 radares instalados en todo el territorio nacional, las más de 10.000 denuncias por exceso de velocidad puestas por el Cuerpo, las 78.000 personas a las que sometieron a controles de alcoholemia el pasado año y las 2100 sanciones impuestas por superar la tasa de alcohol permitida en sangre.
Y es que muchas cosas han cambiado en la lucha por evitar los accidentes de tráfico en todos estos años. En los 60, la década en que miles de europeos descubrían las bondades turísticas españolas y él primer astronauta apellidado Armstrong pisaba la luna, aparecía el primer permiso de conducir, que hacía de su poseedor alguien con cierto estatus social; los 70, junto a la llegada de la democracia, lo hacía la famosa "L" que acompaña a los conductores noveles y que tan ansiada es por muchos aún hoy en el Siglo XXI; los 80 fueron, además de la década del 23-F y la última vez hasta que Almería vio un equipo suyo en Primera División hasta el año 2007, la de los más de 4.000 muertos en carretera por año y en los que se hizo obligatorio el uso de casco en la moto. "Si bebes no conduzcas", escuchaban por primera vez los españoles de la voz de Steve Wonder apoyado por la inolvidable campaña de la ardilla que nos recordaba que, al volante, precaución. Por fin, llegaron los inolvidables 90 y los Juegos Olímpicos de Barcelona y la EXPO de Sevilla, los años del milagro económico español de la mano del primer Gobierno Aznar tras la recesión de comienzos de la década junto al declive del socialismo de González, y con ellos más muertes en la carretera, a lo que las autoridades respondieron con la obligatoriedad del cinturón de seguridad y dando comienzo a la concienciación masiva de los ciudadanos que alcanzó su punto álgido con la llegada del Carnet por puntos que el Gobierno de Zapatero impuso en 2006, y gracias a la cual los accidentes han descendido hasta alcanzar unas cifras de 2.181 fallecidos en 2008, una cifra sobresaliente frente a los 3.332 de 2005, el última año con el viejo permiso.
Por su parte, la provincia de Almería también ha seguido la línea marcada por los datos a nivel nacional y ha descendido progresivamente el número de fallecidos en carretera. Así, desde los 92 muertos en 2005, se ha pasado a los 36 de 2008, un dato mejor, pero en ningún caso positivo ya que, como señaló ayer José María Méndez, mientras haya un sólo muerto en nuestras carreteras la cifra nunca podrá ir acompañada de adjetivos positivos. De momento, se va camino de ello.
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