“Adra es un municipio seguro”: el subdelegado pide calma tras el crimen y el incendio en Puente del Río

Mientras la Guardia Civil continúa buscando al presunto autor del disparo que acabó con la vida de un joven en Puente del Río el pasado lunes, y mientras aún huele a hollín en las casas calcinadas por el incendio de la madrugada siguiente, el subdelegado del Gobierno en Almería, José María Martín, ha lanzado este miércoles un mensaje claro: “Adra es un municipio seguro”.

Lo ha hecho a pocas horas de participar en una junta local de seguridad urgente, convocada por el alcalde, Manuel Cortés (PP), ante la creciente alarma social en la barriada abderitana. El encuentro se celebra a las 16:30 de esta tarde y reunirá a responsables de Guardia Civil, Policía Local y Protección Civil, además de representantes de ambas administraciones.

“Desde el primer momento en que se produjo el homicidio, el contacto con el Ayuntamiento ha sido constante. Acordamos esta junta como foro de coordinación para analizar la situación del municipio y, en particular, de Puente del Río”, ha explicado el subdelegado a los medios.

Martín ha reconocido que los acontecimientos de las últimas 48 horas han generado “preocupación”, pero ha subrayado que se trata de hechos “puntuales” que no deben distorsionar la imagen global de la ciudad. “Adra no es un lugar donde la inseguridad esté proliferando más de lo normal. Sus índices de criminalidad están dentro de la media de la provincia”, ha afirmado.

Tiroteo y fuego en una misma barriada

El lunes por la mañana, un joven de 23 años murió tras recibir un disparo en la calle Marte, en el corazón de Puente del Río, durante una reyerta entre clanes familiares rivales. La víctima pertenecía al conocido ‘Clan de los Lateros’, una organización criminal dedicada al contrabando de combustible para narcolanchas, parcialmente desarticulada en 2024 durante la operación Ovidio.

Horas después, la madrugada del martes, cuatro viviendas ardían en la calle Júpiter, apenas a unos metros de la escena del crimen. Las llamas se propagaron rápidamente por el mobiliario, aunque no se registraron heridos. La posibilidad de que se tratara de una represalia está sobre la mesa, aunque aún no hay confirmación oficial. Tampoco detenciones.

La secuencia de violencia ha encendido las alarmas en el barrio y ha provocado críticas desde algunas asociaciones de guardias civiles, que denuncian la escasez de patrullas en el municipio la noche del incendio. Según estas fuentes, solo había un coche policial operativo para todo Adra.

“El riesgo cero no existe”

Preguntado por esa falta de refuerzo, José María Martín ha evitado responder directamente, pero ha insistido en que se está trabajando “desde el primer momento” y que se utilizarán “todos los medios necesarios” para reforzar la seguridad si así lo requiere la evolución del caso.

“El riesgo cero no existe. Pero quiero hacer un llamamiento a la tranquilidad. La Guardia Civil lleva años demostrando su eficacia en esta provincia y esta vez no va a ser distinto”, ha asegurado. “Desde el nivel del puesto local hasta la comandancia provincial, o incluso más arriba, se tomarán todas las medidas necesarias”.

Martín ha querido destacar también la “magnífica coordinación” entre las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y la Policía Local, y ha defendido el valor de la junta local de seguridad como espacio para evaluar la situación, ajustar recursos y enviar un mensaje de unidad institucional.

Mientras tanto, en Puente del Río, muchos vecinos observan desde sus ventanas con una mezcla de miedo y resignación. Temen que la tensión entre clanes pueda escalar, como ha ocurrido en otros puntos del Poniente. Pero, por ahora, lo único que saben con certeza es que su barrio —otrora tranquilo— ha aparecido en los informativos nacionales dos días seguidos. Y eso, en Adra, ya es motivo de inquietud.