Los números de la pandemia en la provincia de Almería vienen siendo una montaña rusa. Cada día, números que no ofrecen una dinámica evolutiva clara. Y es posible que este aspecto se alargue en el tiempo hasta que un buen porcentaje de la población almeriense esté vacunada.

Los datos que la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía arrojan este lunes son de 63 nuevos positivos y un muerto. Esto significa que durante este fin de semana ha habido 334 nuevos casos y cuarto fallecimientos. Cifras nada positivas siempre y cuando los decesos sigan existiendo. Y ya hay un total de 286 almerienses que han sucumbido ante el virus. 

Lo positivo es que desde el sábado, 697 almerienses han superado la enfermedad. Esto significa que se ha conseguido bajar del millar de casos activos y en la actualidad hay 886 almerienses contagiados.

En la provincia hay en la actualidad un total 94 hospitalizados, de los que 27 en UCI. En la jornada del lunes no hay que lamentar ningún ingresado en cuidados intensivos pero sí dos más en planta.

Casos por municipios

Por distritos sanitarios, en el de Almería se han detectado durante los últimos siete días casos en los siguientes municipios: 263 en la capital, 3 en Benahadux, 2 en Canjáyar, 10 en Carboneras, 5 en Fiñana, 20 en Huércal de Almería, 38 en Níjar, 3 en Pechina, 1 en Rágol, 1 en Rioja y 4 en Viator. 

En el Distrito Levante-Alto Almanzora se han detectado 11 nuevos casos en Albox, 5 en Arboleas, 2 en Bacares, 1 en Bédar, 2 en Cuevas del Almanzora, 5 en Garrucha, 13 en Huércal-Overa, 1 en Macael, 3 en María, 1 en Olula del Río, 8 en Pulpí, 1 en Tíjola, 13 en Turre, 2 en Vélez-Rubio, 7 en Vera y uno en Zurgena. 

En el distrito Sanitario Poniente se han detectado un nuevo caso en Bayárcal, dos en Berja, 54 en El Ejido, 1 en Laujar, 11 en La Mojonera, 50 en Roquetas y 22 en Vícar.

Pausa en la vacunación

Hay que recordar que este pasado domingo las vacunas llegaron a Almería y las primeras personas en recibirlas pertenecieron a la Residencia Geriátrica Ciudad de El Ejido. 

La expectación por las vacunas de la COVID-19 se palpaba en el ambiente y eran varios los móviles y cámaras que inmortalizaban el momento. Las dosis, protegidas en el interior de una nevera especial y en proceso de descongelamiento gradual tal como marcaba el protocolo, al fin fueron sacadas del coche e introducidas con presteza al interior de la Residencia, donde el equipo de tres sanitarios encargado de la administración de la vacuna aguardaba con sus deberes hechos.