Ana Julia Quezada y su pareja declararán como investigadas por amenazas a la madre de Gabriel Cruz

El Juzgado de Instrucción número 1 de Almería ha citado a declarar el próximo 23 de julio a Ana Julia Quezada y a su actual pareja como investigadas por presuntas amenazas de muerte contra Patricia Ramírez, madre del niño Gabriel Cruz, asesinado en 2018 en Las Hortichuelas (Níjar). La comparecencia se enmarca en unas diligencias reabiertas a raíz de una denuncia presentada el pasado 31 de diciembre y de los testimonios recabados desde entonces.

Ese mismo día están previstas las declaraciones de la propia Patricia Ramírez como perjudicada y de al menos una testigo que coincidió con Quezada en la prisión de Brieva, donde cumple condena por el crimen. También se ha acordado llamar a otras internas citadas en la instrucción, así como a una tarotista con la que presuntamente contactó la pareja de Quezada.

Según ha podido saber Diario de Almería, la citación de M.A.R.Q., pareja de Ana Julia, está vinculada a un escrito presentado por la acusación particular, que sospecha que esta habría actuado como intermediaria en la transmisión de amenazas. Ambas serán interrogadas en calidad de investigadas.

Las pesquisas arrancaron cuando una interna de Brieva alertó a la letrada de Patricia Ramírez, Verónica Guerrero, sobre expresiones amenazantes atribuidas a Quezada, quien supuestamente expresó su deseo de "matar" a la madre de Gabriel por haber "boicoteado" un documental que intentaba grabar desde prisión. La denunciante llegó a pedir protección de sus datos personales a la Guardia Civil tras recibir llamadas desde números desconocidos.

El caso fue inicialmente archivado, pero reabierto tras recurso y práctica de pruebas. A su vez, estos hechos guardan relación con otra causa que se sigue en el Juzgado de Instrucción número 4 de Ávila, donde se investiga si Ana Julia Quezada recibió favores sexuales de funcionarios penitenciarios a cambio de móviles, y si existía un proyecto de grabación desde prisión vinculado a su figura.

Ana Julia Quezada fue condenada en 2019 a prisión permanente revisable por el asesinato del niño Gabriel Cruz, de ocho años, cuyo cuerpo ocultó durante doce días en una finca del padre del menor. El caso conmocionó a toda España y la sentencia fue ratificada por el Tribunal Supremo. Desde prisión, y según denunció su madre, Patricia Ramírez, la revictimización ha continuado.

“Después de ocho años no ha habido una sola investigación patrimonial de Ana Julia. No ha pagado nada. Y mientras tanto puede estar ganando dinero con un documental”, expresó Ramírez entre lágrimas el pasado mes de mayo ante los medios en Almería.