Aria, la perra adoptada que lidera la nueva unidad canina de la Policía Local de Almería

Almería cuenta desde esta semana con su primera unidad canina en la Policía Local. La protagonista es Aria, una perrita entrenada para la detección de sustancias estupefacientes, que se suma al equipo del Grupo de Intervención Rápida (GRIP), creado recientemente para reforzar el dispositivo de seguridad ciudadana.

El contrato, con una duración de un año y un presupuesto de 4.840 euros (IVA incluido), contempla también la formación de tres agentes del Grupo Rápido de Intervención Policial (GRIP) como guías caninos y la habilitación de un espacio específico en la Jefatura de Policía para la estancia de Aria durante sus turnos de servicio. Fuera de estos turnos, el animal residirá con su propietario, quien asumirá los costes de manutención, cuidado y atención veterinaria.

La alcaldesa, María del Mar Vázquez, acompañada por la concejala de Seguridad Ciudadana, María del Mar García Lorca, por el superintendente jefe, Gregorio Zambudio, y por Diego Beltrán, del Club Canino Ciudad de Almería, ha sido la encargada de anunciar su puesta en marcha. “Es un orgullo inaugurar esta unidad canina, una demanda de la propia Policía Local que servirá para hacer más efectivos los operativos contra las drogas”, ha subrayado la alcaldesa, quien también ha anunciado que el primer servicio de Aria será en el festival Dreambeach.

El superintendente jefe de la Policía Local, Gregorio Zambudio, destaca que la llegada de Aria reforzará los controles estáticos y dinámicos de vehículos, especialmente en lo relacionado con el registro y cacheo en intervenciones de seguridad ciudadana. “Una de las infracciones más detectadas en nuestras actuaciones es la tenencia de hachís o marihuana. Esta unidad nos aportará una herramienta funcional y muy eficaz”, ha señalado un portavoz del cuerpo.

Una historia de superación y compromiso

Aria tiene una historia tan singular como inspiradora. Fue adoptada hace tres años del del Centro Municipal Zoosanitario, en el marco de un curso de adiestramiento promovido por el Ayuntamiento y la Cámara de Comercio.

El adiestrador, Diego Beltrán, que participó en ese programa, la adoptó junto a su familia tras observar sus cualidades. “Mi hija, con solo diez años, comenzó a entrenarla en obediencia y en una disciplina de búsqueda y marcaje de objetos. Hace un año, juntas fueron campeonas de España en STPR”, explica con orgullo Beltrán.

A partir de ahí, y tras varios intentos para iniciar una unidad canina en la Policía Local, Aria se convirtió en la opción ideal para liderar este nuevo proyecto. Durante los dos últimos meses, ha sido adiestrada para cambiar el marcaje de objetos por la detección de sustancias. “La implicación de los tres guías ha sido ejemplar: han entrenado en días libres, vacaciones y turnos, siempre con predisposición”, ha destacado Beltrán.