Las casas encantadas de Almería: un recorrido por los lugares donde el misterio nunca duerme
Fantasmas, tragedias y ecos del pasado conviven en viejas mansiones, palacios y hospitales de la provincia de Almería
Un paseo por la Almería más misteriosa con Alberto Cerezuela
En Almería, las historias de fantasmas no son solo cuentos de medianoche. Detrás de muros centenarios y pasillos en penumbra hay voces, tragedias y símbolos que se niegan a desaparecer. Viejas mansiones, palacios en ruinas y antiguos hospitales conservan relatos de apariciones, luces y susurros que desafían al tiempo. Este es el mapa más completo de los lugares donde, según cuentan, el pasado aún tiene rostro.
1. La Mansión de Pescadería: el lamento de la familia olvidada
En el barrio más antiguo de la capital almeriense, la Mansión de Pescadería es considerada la casa más embrujada de la ciudad. Vecinos y curiosos aseguran oír lamentos y portazos en su interior. La leyenda habla de una familia que murió trágicamente y cuyos espíritus quedaron atrapados entre sus muros. Su fachada en ruinas y el silencio del barrio le dan un aire tan inquietante como magnético.
2. Teatro Cervantes: el fantasma de Conchita Robles
El Teatro Cervantes, inaugurado en 1921, fue escenario de una tragedia real: la actriz Conchita Robles fue asesinada en plena función por su exmarido. Desde entonces, técnicos y artistas dicen haberla visto entre bastidores, con su vestido blanco y una rosa en la mano. Las luces que se encienden solas y las puertas que se abren al vacío forman parte del mito más conocido del misterio en Almería.
3. Colegio Stella Maris (“Las Jesuitinas”): el niño Ricardito
En la Rambla de Almería, el colegio de las Jesuitinas guarda una historia tan popular como estremecedora. Se dice que un alumno, Ricardito, murió allí hace décadas y que su espíritu sigue jugando por los pasillos. Profesores y antiguos alumnos aseguran haber visto pelotas que ruedan solas, juguetes encendidos y puertas que se mueven sin causa aparente. La historia se ha transmitido durante generaciones como una leyenda urbana imposible de borrar.
4. Casa del Cine (Villa Santa Isabel): las sombras del rodaje eterno
La elegante Villa Santa Isabel, hoy convertida en Casa del Cine, fue escenario de estancias de estrellas y rodajes míticos. Pero entre sus paredes se habla de sombras que cruzan los pasillos y habitaciones donde la temperatura cae de golpe. Algunos empleados relatan haber sentido presencias mientras cerraban el edificio. Quizá no sean fantasmas, sino ecos de un pasado de cine que se resiste a apagarse.
5. Hospital de la Cruz Roja (Avenida Cabo de Gata): la enfermera del pabellón viejo
En la Avenida Cabo de Gata, muy cerca del centro de Almería, se alza el antiguo Hospital de la Cruz Roja, un edificio que durante medio siglo fue referencia sanitaria en la provincia. Desde que dejó de funcionar como hospital a finales del siglo XX, muchos vecinos y vigilantes han relatado ruidos, luces encendidas sin motivo y pasos en los pasillos del ala antigua.
La leyenda más conocida habla de una enfermera que continúa recorriendo las plantas donde atendía a los enfermos. Aunque hoy el recinto acoge dependencias formativas y administrativas, sigue siendo uno de los lugares más citados en las rutas del misterio de la ciudad.
6. Hospital Provincial: las monjas del pasillo
El histórico Hospital Provincial, uno de los más antiguos de Almería capital, acumula relatos sobre figuras con hábito blanco que se mueven en silencio por los pasillos. Algunos creen que son las Hermanas de la Caridad que atendieron a enfermos durante la posguerra. Aunque el edificio conserva parte de su actividad, las zonas vacías y los sótanos cerrados han alimentado su fama como uno de los lugares más inquietantes de la ciudad.
7. Edificio de las Mariposas: la dama del banco
En pleno centro de la ciudad, el Edificio de las Mariposas no solo destaca por su belleza modernista. Antiguos empleados del banco que lo ocupaba contaban que, en noches de guardia, una mujer vestida de época aparecía junto al ascensor. Nunca hablaba. Solo miraba. Hoy, el edificio es símbolo de las rutas del misterio que recorren el corazón histórico de Almería.
8. Palacio de Almanzora (Cantoria): las risas del salón vacío
Este imponente palacio neoclásico del siglo XIX domina el paisaje de Cantoria. Durante años, vecinos del entorno han relatado haber escuchado risas y pasos en su interior, pese a encontrarse vacío. Algunos hablan de los ecos de antiguos bailes de gala, otros de presencias que se resisten a abandonar su hogar. Lo cierto es que su aspecto decadente y majestuoso alimenta su fama de palacio encantado.
9. Cortijo del Fraile (Níjar): los fantasmas de la boda de sangre
En el Cortijo del Fraile, la tragedia fue real. En 1928, un crimen pasional estremeció al Campo de Níjar y dio origen a Bodas de sangre, la obra de Federico García Lorca. Desde entonces, quienes lo visitan de noche dicen oír campanas, rezos y lamentos que parecen venir del pozo. Nadie duda de su carga simbólica: es el lugar donde la historia y el mito se funden para siempre.
10. El Arteal (Cuevas del Almanzora): los mineros que nunca salieron
En las minas abandonadas de El Arteal, los vecinos aseguran ver luces que se mueven entre los túneles y escuchar golpes metálicos cuando todo está en silencio. La historia dice que varios mineros murieron allí, atrapados bajo tierra, y que sus almas aún buscan salida. Hoy, exploradores y curiosos lo visitan como el último enclave del misterio minero almeriense.
También te puede interesar
CONTENIDO OFRECIDO POR DIPUTACIÓN DE ALMERÍA