Condenados por simular un robo en su pub de Vícar para estafar al seguro

El intento de cobrar una indemnización tras denunciar un falso robo en un pub de Vícar les ha costado tres meses de prisión a una mujer y a su expareja, condenados por el Juzgado de lo Penal número 5 de Almería por un delito de estafa en grado de tentativa. Ambos idearon un plan en noviembre de 2015 para engañar a la aseguradora MAPFRE, simulando un asalto su local que jamás tuvo lugar.

La sentencia, ya notificada a las partes, absuelve a los acusados del delito de simulación de delito, al considerar que la denuncia no provocó actuación judicial alguna, pero sí aprecia que trataron de engañar a la aseguradora mediante una reclamación fraudulenta valorada en más de 5.000 euros.

Según los hechos probados, fue la mujer quien interpuso la denuncia ante la Guardia Civil de Vícar, siguiendo las indicaciones de su entonces pareja, gestor del negocio. Aportó una lista de objetos supuestamente sustraídos, entre ellos un televisor, ordenadores, un proyector, una mesa de mezclas y casi 900 euros en efectivo. Días después, ambos contactaron con la compañía aseguradora para tramitar la supuesta indemnización.

Sin embargo, los agentes que investigaron el caso detectaron numerosas irregularidades. Entre ellas, que algunos objetos denunciados ni siquiera estaban en el local, que no había señales de forzamiento en la puerta, y que el establecimiento no contaba con sistema de videovigilancia ni alarma activa. Además, constataron que en un corto espacio de tiempo se habían denunciado otros supuestos robos en negocios relacionados con los implicados.

La aseguradora rechazó finalmente abonar la indemnización al detectar indicios de fraude. Aun así, el tribunal ha entendido que la actuación de ambos fue dolosa y orquestada con ánimo de lucro, considerando acreditada la tentativa de estafa.

Pese a las versiones exculpatorias ofrecidas por los acusados en el juicio, la magistrada concluye que existió una "participación activa y coordinada" para simular el robo y reclamar la indemnización, aunque el engaño no llegó a consumarse por causas ajenas a su voluntad.

Por todo ello, se les impone una pena de tres meses de prisión, además de la inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante ese tiempo y el pago proporcional de las costas procesales. La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante la Audiencia Provincial.