La copla se viste de luto

El autor de Mi Carro, del Porrompompero, de Viva España, falleció ayer a los 82 años en su casa de Benidorm, localidad alicantina en la que estuvo hospitalizado estos últimos días, por el cáncer que padecía, según fuentes próximas a la familia. El almeriense, que sufría esa enfermedad desde hace años, tuvo que ingresar en una clínica de la localidad alicantina a comienzos de octubre por una insuficiencia renal y tras haber padecido un pequeño ictus. Fue dado de alta hace unos días y, desde entonces, se hallaba en su domicilio de esta ciudad alicantina, donde residía desde hacía años y donde ha encontrado la muerte, rodeado de los suyos.

El artista, que el día 19 celebró su cumpleaños, tenía incluso previsto retomar sus actuaciones con vistas al próximo año. El 4 de enero tenía previsto repasar los grandes temas de su larga trayectoria artística en un concierto en el Palacio Euskalduna de Bilbao.

La capilla ardiente se instaló ayer por la tarde en el salón de plenos del Ayuntamiento de Benidorm y permanecerá abierta al público hasta hoy por la tarde, cuando se celebrará el funeral. Considerado uno de los máximos representantes de la canción española y de la copla, con más de medio siglo en activo, Manolo Escobar era uno de los principales símbolos de la cultura popular.

El cantante murió "dulcemente", "como durmiendo", en su casa, mientras hablaba con su familia y tras pasar dos días "magníficos", explicaba su sobrino y representante, Gabriel García Mármol. "Le dieron el alta el lunes y ha estado estos días estupendamente. Pero, mientras estaba hablando con él normalmente, le ha dado una especie de crisis cardiorrespiratoria y cada vez ha ido respirando más débilmente. Y se ha ido mientras yo le decía, 'pero, oye, padrino, escucha'", relataba emocionado su sobrino.

Con más de más de 80 discos editados, era uno de los intérpretes de copla y canción española más conocidos dentro y fuera de España, gracias a súper ventas como Mi carro, El porompompero, La minifalda y ¡Que viva España!.

Nacido en 1931 en el municipio almeriense de El Ejido, quinto hijo de una familia de diez hermanos, pasó su infancia en Badalona (Barcelona), ciudad a la que se trasladaron con 14 años porque, diría después, "no se resignaban a no tener trabajo".

Allí formó junto a varios de sus hermanos el grupo Manolo Escobar y sus guitarras, que llegó a grabar un disco. La aventura de la música era, no obstante, una empresa demasiado arriesgada en aquella España de los cincuenta y solo él siguió adelante.

Debutó en solitario en 1961 en Córdoba con el espectáculo Canta Manolo Escobar, iniciando una primera década de éxito jalonada por dos hitos musicales, la rumba El porompompero y Mi carro, probablemente su canción más icónica, aunque recientemente declarara que estaba "hasta las narices" de ambas. En la década de los sesenta y de los setenta, Manolo Escobar protagonizó películas como Los guerrilleros, Mi canción es para ti, Un beso en el puerto, Juicio de faldas, En un lugar de la Manga, Entre dos amores, Cuando los niños vienende Marsella o Alejandra, mon amour.

Pero fue la música la que le proporcionó más galardones, con más de 40 Discos de Oro en su trayectoria o la Medalla de Oro del Mérito al Trabajo en 2011, uno de los premios que más ilusión le hizo conseguir, junto con el de Hijo Predilecto de El Ejido, que recibió el pasado septiembre. Sus últimos diez años de vida se vieron trabados por numerosas visitas al hospital. Así, hace apenas tres años, se le extirpó un tumor en el colon que acabaría en metástasis, pero nada le impedía retornar una y otra vez al trabajo, aunque fuera "con una muletita" como solia decir, como la que portaba tras la operación de cadera a la que se sometió en 2012.

Aparte de la música, la pintura fue la otra gran pasión artística de Escobar, que era propietario de una importante colección de cuadros contemporáneos. Llevaba más de 50 años casado con Anita Marx, una mujer alemana a la que conoció en Playa de Aro (Girona). En 1977, adoptaron una niña, Vanesa, a quien dedicó algunos de sus temas y con la que grabó en 1982 el tema Papá, te quiero mucho.

De entre todas las reacciones a su fallecimiento destaca por inesperada la del presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, quien destacó que Manolo Escobar hizo de Cataluña su tierra y el lugar donde "desarrollar su talento y dar a conocer su arte". El presidente recordó que el último galardón que ha recibido en vida el cantante andaluz fue la Medalla al Treball del President Francesc Macià, que el gobierno catalán le concedió el 8 de octubre. Mas racalcó que "un hombre polifacético, comprometido con la cultura, merecía este reconocimiento", después de décadas de trabajo y entrega a su arte, dos de ellas en Cataluña. El presidente destacó Escobar ha sido un "ejemplo representativo" de centenares de miles de personas que emigraron a Cataluña y la hicieron su país, una tierra donde progresar, formarse y fundar una familia".