Un dirigente de la cantera de ETA, en libertad tras pagar 30.000 euros

Xabier Arina Etxarte de 27 años de edad se ha convertido en el primero de los presos relacionados con el entorno de la banda terrorista ETA (en este caso en concreto de la que se considera su cantera, la dirección de la organización ilegalizada Segi) que ha sido excarcelado de la prisión provincial de El Acebuche.

Según ha podido conocer Diario de Almería, la petición de puesta en libertad por parte del Ministerio público llegó a comienzos de la presente semana y estaba establecida en una fianza de 30.000 euros. Las mismas fuentes confirmaron que a pesar de la cuantía que se solicitaba, apenas 48 horas después, dicha fianza estaba depositada y confirmada por lo que Xabier Arina abandonó la cárcel almeriense a primera hora de la tarde del pasado jueves.

Xabier Arina fue trasladado recientemente al recinto penitenciario almeriense, en concreto en el mes de abril del año pasado. En esas fechas, varias redes sociales relacionadas con el entorno de los presos de la banda terrorista ETA, lanzaron una campaña de denuncia en la que señalaban que le habían aplicado el primer grado y se encontraba en aislamiento en la cárcel de Navalcarnero, justo antes de proceder a su traslado hasta Almería.

Arina fue detenido el 21 de octubre de 2011 en una operación lanzada por las fuerzas de seguridad en varias localidades del País Vasco y Navarra en la que se dio por desarticulada la estructura completa de la organización Segi. Arina fue detenido en su localidad natal de Burlada, en Navarra donde, según se informó entonces por el Ministerio del Interior, tenía la misión de "reestructurar la cantera de ETA".

Arina fue acusado de pertenecer a un grupo Y que habría cometido más de 40 actos de violencia callejera en localidades navarras entre los años 2004 y 2007. Detenido también en 2009, fue acusado por el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco de los delitos de "integración en organización terrorista, atentado contra la autoridad, tenencia, depósito y empleo de aparatos explosivos y daños en la vía férrea". También fue acusado de atentado con cócteles molotov a la sede del Partido Socialista de Navarra, oficinas de Correos y entidades bancarias de Pamplona y alrededores.

Era la segunda operación contra Segi desde que fuera ilegalizada por el juez Baltasar Garzón en 2001 por considerarla sucesora de las también ilegales Jarrai y Haika. El Supremo confirmó su ilegalización en 2007. Dos años después el magistrado Grande-Marlaska consideró en un auto a Segi como "un tentáculo de ETA" y una "auténtica academia terrorista" para la continuación de la "lucha armada".