Entre el diseño de parques acuáticos y el despacho

Christian Quero (27 años). Alcalde de Olula de Castro

Compaginará su labor de ingeniero y estará en el ayuntamiento lunes, miércoles y viernes.

Iván Gómez

03 de agosto 2015 - 08:58

Christian Quero, de 27 años, es de los que entienden la política como un servicio público a los ciudadanos como ocupación provisional, sin echar raíces, el tiempo necesario para dejar huella en la gestión local. De ahí que no se haya planteado dejar su trabajo, como ingeniero de puertos y caminos, ahora que ha sido elegido alcalde de Olula de Castro. Compaginará su nuevas funciones y tareas de regidor de un pueblo de casi 200 habitantes con el diseño y la construcción de parques acuáticos para la empresa David Theming Works en la que ha solicitado reducción de jornada. Consciente de la responsabilidad que ha asumido, considera que a pesar de la juventud con ganas e ilusión se supera los déficits de la inexperiencia. Desde mayo es el brazo ejecutor del ayuntamiento, prácticamente lo gestiona todo con la ayuda de la secretaria, y el cabeza visible de un socialismo que no remontaba el vuelo hasta la incorporación de savia nueva. Y es que Christian Quero Gil acudió en rescate del PSOE para acabar con un largo mandato de casi veinte años de Guillermo Mesas en filas del PP, del partido de Juan Enciso y como independiente. En meses puso en marcha las agrupaciones municipal y de las juventudes y no ha parado de poner proyectos y nuevas ideas sobre la mesa desde que tomara las riendas del partido que había estado condenado a la oposición por el mínimo vínculo con el municipio que tenían sus anteriores candidatos.

Sus principales retos son paliar la considerable deuda municipal de alrededor de 200.000 euros, en torno a mil por habitante y darle un impulso al turismo rural con nuevos senderos y alojamientos. Nada más llegar al consistorio se ha encontrado con una piscina que se cae a pedazos un año después de ser inaugurada, un asunto que está en manos de Diputación que fue la promotora del contrato, y con el sabotaje de las tuberías del abastecimiento que ha obligado a echar mano a cubas de agua como en tiempos pasados. Y ha sido lo más eficaz y diligente posible, más de lo que algunos esperaban por su juventud. Y es que Quero Gil, un amante del bricolaje y de disfrutar de la naturaleza como no podía ser de otra forma, sabe coger el toro por los cuernos y sobre el terreno será un alcalde resolutivo. Entre los objetivos de la corporación que arrancó hace unos meses tendrá un especial protagonismo estar con los mayores, apostando por la cercanía con los vecinos y mejorar los servicios públicos que reciben.

stats