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La crisis que azota el país está afectando a todos los sectores laborales. Tanto es así que ni siquiera la agricultura, motor de la provincia almeriense, se salva de la quema. La mayoría de los agricultores plantarán durante estas semanas para obtener producto lo antes posible, rompiendo con la tónica habitual de hacerlo a finales del mes de agosto e incluso en septiembre.
La finca de Víctor Sánchez García, un agricultor de Níjar socio de la cooperativa CASI, es la primera que visitó Diario de Almería de un total de tres distintas, en las que comprobó cómo se prepara la tierra y cómo es el proceso de esta siembra prematura. Pero para ello, tenemos que remontarnos un mes atrás. Exactamente el 5 de junio. "El 5 de junio cerré la temporada y arranqué todas las plantaciones". Después vino la limpieza de los dos invernaderos que el agricultor de Níjar tiene en su posesión y toda la suciedad que se acumuló durante todo el año. "Posteriormente avinamos la tierra y le metemos mucha agua, además de recoger las gomas". Los restos orgánicos fueron recogidos por un camión y se llevaron a una planta de reciclaje de Níjar. El último paso es la colocación del plástico para la solarización de la tierra y la desinfección de la misma, echándole mucha agua para que se evapore.
Durante todo este mes los dos invernaderos de nuestro protagonista se encuentran a una temperatura de 70-80ºc , al estar completamente cerrados tanto las puertas como las ventanas. Esto se hace para quemar toda la maña hierba que pueda quedar, plagas, insectos, y "que todo se funda con el calor".
Y así hasta ahora, después de un mes, en el que comienza la siembra de vegetales de cara a un nuevo curso agrario.
El 27 de julio retiré todo el plástico y abrí todas las ventanas de los dos invernaderos, que alcanzan en total, casi dos hectáreas de superficie. Tras esto, nuestro protagonista apartó toda la arena de los goteros y de las gomas. Después dejó reposar la tierra hasta el momento actual.
Comienza el primer día de plantación de lo que será la nueva campaña agrícola 2012-2013 en los invernaderos de Víctor Sánchez. Son las 10:00 horas de la mañana y nuestro protagonista se pone manos a la obra. La temperatura va aumentando conforme pasa la mañana. La ligera brisa de la mañana da paso al intenso calor sofocante dentro de las posesiones de nuestro protagonista.
El primer paso es coger el legón y apartar toda la tierra de los goteros. Después de esto se vuelve a regar la tierra. Posteriormente comienzan a hacer agujeros con la barrena, un amplio pincho que realiza hoyos a medida de las necesidades del cultivo que se va a sembrar.
Inmediatamente a ello, comienza la siembra de los vegetales ya que "no se puede hacer los hoyos y no plantar puesto que la tierra pierde la humedad y ya no sirve". Un total de 150 arbeolos están preparados en la finca del agricultor de la CASI. "Estos arbeolos se meten en materia orgánica, con estiércol líquido, y un producto repelente de plagas". Tres personas, además del protagonista, están preparadas para comenzar la faena. El proceso es lento y cuidadoso. En el primer invernadero el producto elegido es el tomate pera byelsa.
El trabajo es duro. Los agujeros están hechos a la medida de las plantas y la siembra debe realizarse con mucho esmero. Una vez que se mete el tallo del vegetal, se tapa con tierra y se verifica que el cultivo quede recto.
Después de esto, vuelve a regarse toda la finca con bastante agua hasta que toda la finca quede humedecida en su totalidad.
"Esto se realiza para que la raíz agarre pronto y, una vez que la planta ha agarrado, empezamos a echar algo de fitosanitarios".
La primera finca está cubierta. Es el paso de trasladarnos al segundo invernadero. Allí, nuestro protagonista, plantará tomate tovi total. El mismo proceso volvemos a realizarlo en esta superficie. Hacer los agujeros precede la plantación de los vegetales que, en este caso, son más chicos que los anteriores.
El siguiente proceso, en las próximas semanas, será echar fitosanitarios y abono. "A las tres o cuatro semanas, las primeras flores ya empiezan a salir y metemos los abejorros para que polinicen las mismas. Tras esto, ya empieza la mata a funcionar".
En 40 días aproximadamente los primeros tomates estarán listos para ser comercializados, una comercialización que esta campaña terminará en diciembre o enero en los invernaderos de Víctor Sánchez. "En invierno arrancaré las plantaciones y optaré por cultivos como la sandía o el melón". Este año he optado, además de por sembrar antes de tiempo, por realizar cultivos en cortos ciclos y no largos.
Tras algo más de 3 horas, termina la jornada de siembra en las posesiones del agricultor de la CASI, momento en el que aprovechamos para desplazarnos a otra finca. En concreto, la de Francisco López Sánchez, perteneciente a CASUR. En este caso, el producto elegido ha sido el calabacín.
Cuando llegamos los hoyos ya están realizados aunque, para nuestra sorpresa, nos encontramos con que la siembra será totalmente distinta a la del tomate. "El calabacín se siempre con semillas, buscando la tierra fértil y húmeda y luego se cierra el hoyo para evitar que los pájaros o topos puedan comérsela". Esta plantación es de periodo corto, por lo que en 35 días estará el producto en pleno rendimiento. Al igual que el primer agricultor, Francisco, que también plantará pepino, realizará ciclos cortos ya que en diciembre cultivará sandías. La jornada se cierra con la plantación de pepino, que se realiza de forma similar a la del tomate. Es la herencia de la dura crisis, que ha obligado a que la siembre se realice este año prematuramente.
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