Fracasa el sistema de refrigeración en las aulas de Almería: “No alivia el calor”

La mayoría de los docentes almerienses considera que el sistema de refrigeración adiabática implantado por la Junta de Andalucía no funciona para combatir el calor en las aulas. Según una encuesta realizada por el sindicato CSIF en centros educativos públicos de la provincia, 9 de cada 10 profesores afirman que este modelo no logra reducir de forma efectiva las altas temperaturas.

El estudio, que analiza las condiciones térmicas en colegios e institutos de Infantil, Primaria, Secundaria, Formación Profesional, Educación Especial y centros artísticos, alerta de un malestar generalizado entre los profesionales. “El calor afecta al bienestar, a la salud y a la calidad de la enseñanza”, ha denunciado el Sector de Educación de CSIF, que urge a la Junta a revisar su apuesta por esta tecnología.

Solo el 8,5 % de los centros de Almería cuenta con el sistema

A pesar de que la Consejería de Desarrollo Educativo defiende las bondades del sistema adiabático —por su bajo consumo eléctrico y sus bajas emisiones—, el 86 % del profesorado consultado asegura que solo proporciona un alivio leve del calor, y un 27 % denuncia que genera sensación de humedad, sin resolver el malestar térmico. El sistema, que se basa en la evaporación del agua para reducir la temperatura del aire, está presente en menos del 9 % de los centros almerienses, según el informe.

Además, un 14,3 % de los docentes señala que el ruido que genera es molesto y constante, lo que dificulta el desarrollo normal de las clases. La instalación, que ha sido promocionada como alternativa sostenible al aire acondicionado, ha despertado el interés de otras comunidades autónomas, pero su eficacia en Andalucía sigue siendo muy cuestionada.

Falta de mantenimiento, riesgo sanitario y desigualdad entre centros

CSIF advierte también del riesgo para la salud que supone la falta de limpieza y revisión de estos sistemas. Algunos centros han tenido que dejar de usarlos por no contar con mantenimiento especializado, lo que podría provocar problemas respiratorios e incluso brotes de legionela. A pesar de la obligación legal de realizar controles periódicos, la Junta no asigna presupuesto específico para ello, denuncia el sindicato.

Por otro lado, el informe refleja una realidad desigual: solo el 41 % de los centros cuenta con climatización en todas sus aulas, y en muchos casos la instalación ha dependido de iniciativas de AMPAs o ayuntamientos, no de la administración autonómica. En cuanto a los espacios exteriores, el 62 % de los patios carece de sombra, y solo un 18 % de la que existe proviene de árboles o vegetación natural.

CSIF pide replantear el modelo y actuar con urgencia

El sindicato exige una revisión inmediata del modelo climático implantado en los centros escolares andaluces. “Es necesario adaptar las aulas y los patios para hacer frente a un calor cada vez más extremo”, afirman desde CSIF. También reclaman una inversión real y equitativa que garantice el bienestar de todos los alumnos y docentes, independientemente del municipio en el que estudien o trabajen.