Un mar de sensaciones para jóvenes con discapacidad

Sube la autoestima, reduce el estrés, fomenta la autonomía... son infinitas las sensaciones que han podido experimentar los usuarios de la Unidad de Día de Personas Gravemente Afectadas de la Federación Almeriense de Personas con Discapacidad (FAAM), en su paseo en barco por el litoral almeriense. Durante unas horas se han liberado de su silla de ruedas con 'Terapia en el mar', una actividad que cumple su tercera edición y que tiene como objetivo trabajar la auto percepción de las personas con discapacidad, a través de las emociones, acercándoles un medio poco accesible. Los paseos en barco permiten a estas personas conocer los beneficios del mar, además de disfrutar del entorno vital de nuestra costa y vivir una experiencia única en primera persona, mejorando su salud y promocionando su autonomía. Un año más, una veintena de personas con discapacidad gravemente afectadas participan en el Puerto Deportivo de Aguadulce, en Roquetas de Mar, en la actividad organizada por la FAAM, con la financiación de 933 euros por parte de la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, a través de la línea de Ayudas para Proyectos de Participación en Salud y Ayuda Mutua. El delegado territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, José María Martín, ha asistido a uno de los paseos en barco por la bahía de Almería organizados a través de esta iniciativa, y ha destacado la apuesta de la FAAM por ofrecer a las personas con discapacidad una terapia innovadora, que aprovecha el medio marino de la Bahía de Almería y las buenas condiciones climatológicas de nuestra provincia". Martín ha señalado que "desde la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales venimos apostando por esta actividad desde el año 2014, porque consideramos que ayuda a mejorar la salud y la calidad de vida de las personas con discapacidad, ofreciéndoles la posibilidad de acceder a una actividad adaptada a sus necesidades". El presidente de FAAM, Valentín Sola ha destacado que "se trata de una de las actividades mejor valorada por los usuarios de la Unidad de Día de Gravemente Afectados por la sensación de libertad que se experimenta al poder dejar la silla de ruedas a un lado y disfrutar de un entorno tan especial". Pilar Mostaza, presidenta de la asociación Psiconáutica, propietaria del barco, ha incidido en que "tras diferentes investigaciones podemos llegar a la conclusión de que se obtienen grandes beneficios terapéuticos a través de esta actividad que estamos muy orgullosos de poder ofrecer".