Las pantallas de metacrilato, blindaje de la atención al público frente al virus

Coronavirus Almería

El estudio gráfico almeriense Pixel Plus cambia su rutina de trabajo, y a petición de sus clientes, se ha puesto manos a la obra en la adecuación e instalación de mamparas protectoras

Las  farmacias, que siguen abiertas, entre los demandantes del producto
Las farmacias, que siguen abiertas, entre los demandantes del producto / Diario De Almería

Estos días se habla de la importancia de quedarse en casa y del teletrabajo, pero hay quienes no pueden, por ofrecer al resto de la sociedad los servicios básicos, cumplir con estos preceptos. Por ello, muchos establecimientos, en los que se continúa con la atención al público de manera personal, han optado por medidas de seguridad que van más allá de cumplir con la distancia mínima para evitar contacto y proteger de esta manera a clientes y empleados. Una de ellas es la instalación de pantallas de metacrilato y, para ello, empresas como el estudio gráfico almeriense Pixel Plus, cuyo cometido es el proceso de producción de ideas desde el boceto inicial hasta la finalización del proyecto, estos días se ha volcado con esta tarea.

Tal y como explica Javier Delgado, gerente de Pixel, el trabajo de las pantallas salió de manera espontánea, así el viernes previo a la declaración del estado de alarma, una clienta suya de una farmacia le comentó la situación de falta de protección que estaban pasando ya que en esas jornadas los ciudadanos concurrían en masa a los comercios ante el temor del desabastecimiento y como previsión ante el posible aislamiento, que se convertiría en realidad sólo un par de días después. “El sábado pensé en el metacrilato, ya que es un material higiénico, fácil de limpiar y de instalar. Estuvimos dándole vueltas y vimos que en otros lugares había gente que había tenido la misma idea. Así que en ese mismo fin de semana, mi socio y yo nos pusimos a trabajar en el diseño y a hacer pruebas”, relata Delgado. En ese momento había mucho estocaje de planchas completas, si bien ahora está bajando por la elevada demanda.

En la primera semana hicieron 40 planchas de este material higiénico y fácil de instalar

Pixel, con las planchas en mano, las corta con láser en una fresadora, “tenemos tres medidas estándar que escogimos por su estabilidad de acuerdo a la altura”. Aún así, desde el estudio se han ido amoldando a las necesidades de cada cliente, en este sentido, las mamparas cuentan, además de una abertura a modo de ventanilla para dispensar los productos, papeleo o para pagar, con unos agujeros para facilitar la comunicación, de los que algunos clientes han preferido prescindir. Según Delgado, la firma cuenta con aprovisionamiento; en la primera semana sólo, de lunes a viernes, pasaron de cero a realizar 40 pantallas. “Nosotros hacemos más cosas, no sólo esto, por lo que no me va a cambiar el ritmo de la empresa. También lo hacemos por ayudar, porque nos llaman clientes comentando los precios disparatados con que se las ofertan otros vendedores. Nuestro precio es razonable, porque nuestra pretensión no es aprovecharnos”.

Entre los clientes que han demandado estas pantallas se encuentran desde establecimientos farmacéuticos a estancos e incluso empresas del sector agrícola como CASI para su instalación en los mostradores de cara al público, “la cooperativa está tomando muchas medidas de protección y seguridad, así le hemos hecho también vinilos con señales relativas a la distancia, a lavarse las manos, no pisar sin desinfectarse el calzado...”. De acuerdo a las palabras de Delgado, la pandemia acabará condicionando nuestras vidas y muchas de las iniciativas actuales perdurarán.

Desde Pixel también cuidan su propia salud y, en esta línea, sus empleados también van protegidos, además ellos entregan el material con una película protectora pero aún así aconsejan al cliente que al quitarla limpien la pantalla con alcohol.

Los siete trabajadores que conforman Pixel están volcados con este proyecto, si bien Javier Delgado apunta que desde la empresa han reducido el horario: “Ahora es un ‘boom’ porque nosotros nunca habíamos desempeñado esta labor y estamos recibiendo pedidos, pero tampoco de manera desmesurada, ya que no hemos hecho comercio online ni hemos invertido en promocionarnos en buscadores. Ha sido una labor comercial personal con clientes y luego el boca a boca”. En Pixel estos días trabajan de ocho de la mañana a tres de la tarde porque en estas jornadas difíciles tienen muy en cuenta la conciliación familiar y laboral de su plantilla.

stats