El Partido Popular de Almería ha vuelto a arrasar en las urnas almerienses. El lento pero infatigable rodillo electoral de los populares se había prolongado desde 2004 con una docena de victorias en todas y cada una de las convocatorias en la provincia, pero su hegemonía se truncó en las generales de abril de 2019 con la irrupción de fuerzas emergentes, como Vox y Ciudadanos, que mermaron su caladero de votos de centro-derecha mientras los socialistas cogían impulso. Sin embargo, tres años después ha llegado una remontada histórica con una holgada victoria en las elecciones autonómicas de este domingo en la que han conseguido la mitad de los doce escaños de la circunscripción almeriense en la futura composición de la XII Legislatura del Parlamento de Andalucía.

Seis escaños para una candidatura encabezada por la consejera abderitana de Agricultura, Ganadería Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta, Carmen Crespo, en virtud de los más de 118.000 votos cosechados este 19 de junio en las 808 mesas electorales de la provincia, lo que supone un incremento de más de 47.000 sufragios y 18 puntos en relación a los comicios de hace tres años y medio. El PP almeriense mantenía cuatro diputados autonómicos en la última legislatura y cinco tuvo en la anterior. Habría que remontarse a las elecciones andaluzas de diciembre de 2012, un año después de la llegada al Gobierno de Rajoy, para encontrar un resultado más favorable con siete escaños y el 51,23% de los votos. En 2015 fueron cinco, si bien los cuatro parlamentarios de la última convocatoria se celebraron como nunca antes porque hicieron posible la llegada de Juanma Moreno a la Junta y el cambio político después de casi cuarenta años sin alternancia.

Los populares han teñido de azul casi al completo el mapa de los 103 pueblos almerienses, doblando en resultados tanto a PSOE como a Vox, y aún así es la provincia andaluza donde estas siglas han experimentado un menor crecimiento porque desde principios de siglo mantienen un respaldo mucho más pronunciado que en otras circunscripciones. De hecho, cuando Javier Arenas era el candidato repetía que haría lo posible porque “los vientos de cambio y libertad que soplan en esta esquina discurrieran por toda Andalucía” y así ha sido una década después. En El Ejido y Roquetas casi duplican su resultado de las anteriores elecciones pasando de 6.726 a 12.190 votos en el primero de los municipios y de 7.484 a 14.397 papeletas en el segundo. Es evidente que han recuperado parte del capital electoral que en su día se esfumó hacia la formación liberal que presidía Albert Rivera y precisamente son dos los escaños que gana el PP y se deja Ciudadanos en Almería.

Representantes del PSOE durante el balance del mal resultado en la sede provincial

De hecho, se ha acabado la aventura política de Marta Bosquet, presidenta del Parlamento de Andalucía, que no había repetido como candidata por esta provincia y se presentaba por Sevilla como número 2 de Juan Marín corriendo la misma suerte que su relevo en la circunscripción almeriense, Vicente García Egea. Apenas han logrado 6.600 votos, un 2,5% del electorado. Se han dejado 35.799 papeletas, un retroceso de casi 14 puntos. El PSOE de Almería continúa en caída libre en las andaluzas, después de tres años en los que había disputado el liderazgo provincial al PP en las generales y municipales, y aún consiguiendo mantener los tres escaños, el retroceso en respaldo en las urnas ha sido considerable. Los socialistas han pasado de los 67.309 votos del 2 de diciembre de 2018, que ya había sido su peor resultado de la historia dejándose en torno a 22.000 sufragios y siete puntos en la provincia, a los 57.200 de este 19 de junio. Han perdido más de 10.000 sufragios y 3,83 puntos.

De no ser por la debacle sin precedentes de Ciudadanos, el PSOE sería el gran derrotado de las andaluzas de este domingo. El bipartidismo que se había dejado 52.000 votos en las últimas autonómicas en la provincia en detrimento de las formaciones emergentes, ha salido reforzado de la jornada electoral del 19 de junio pasando de 138.000 sufragios hace cuatro años a nada menos que 175.000, principalmente por fuerte tirón de los populares. Vox se ha consolidado como tercera fuerza política y sigue ganando terreno electoral al conseguir un tercer escaño por Almería. Han logrado 53.700 votos, diez mil más que en las anteriores andaluzas, lo que supone un avance de cuatro puntos (al 20% de votantes) que los ha acercado al PSOE con los que igualan en escaños. De hecho, en dos de los municipios con más habitantes de la provincia (El Ejido y Roquetas) han adelantado al PSOE, al igual que ha ocurrido con bastiones del socialismo como Vícar o Níjar. De las principales localidades de la provincia, el PSOE ha salvado ese segundo escalafón del tablero político en la capital y Huércal-Overa.

La jornada electoral se desarrolló sin incidentes en los 322 colegios electorales

El partido de Santiago Abascal fue el ganador moral de las andaluzas de hace tres años y medio en Almería, la provincia en la que consiguieron un mayor respaldo con casi el 17% de los votos, pero en esta ocasión quedan muy lejos del contundente resultado del PP, pese a subir un nuevo peldaño creciendo en papeletas y representación institucional. En aquella ocasión habían pasado de ser el décimo al tercer partido provincial y la segunda formación con más votos en una treintena de localidades, principalmente las de fuerte arraigo de la agricultura en Níjar y el Poniente. Vox ha crecido en sólo dos escaños en Andalucía y, como no podía ser de otra forma, uno lo ha conseguido en el epicentro del terremoto político andaluz que protagonizaron en 2018. La confluencia de izquierdas se ha vuelto a quedar fuera del plenario del antiguo hospital de las Cinco Llagas de Sevilla al no alcanzar los votos necesarios para tener un diputado autonómico.

Por Andalucía no ha logrado conseguir ni la mitad de los 25.000 sufragios que le dieron el escaño en los anteriores comicios de diciembre de 2018 cuando se presentaron conjuntamente Podemos e Izquierda Unida. Tampoco lo ha conseguido Adelante, el partido que a nivel regional encabeza Teresa Rodríguez, que concurría con el parlamentario Diego Crespo como cabeza de lista por Almería. Si hubieran unido fuerzas en lugar de dividirse probablemente tendrían hoy representación en el Parlamento. La izquierda pierde el escaño que habían mantenido en las dos últimas legislaturas y este domingo se ha descompensado por completo el equilibrio de los bloques ideológicos: 9 parlamentarios para el centro-derecha (PP y Vox) frente a los 3 de la izquierda (PSOE).

La participación ha crecido en tres puntos en la provincia pasando del 52,8 al 55,9%. La jornada electoral transcurrió con normalidad y sin incidencias en las 808 mesas instaladas en los 322 colegios electorales de los 103 municipios de la provincia en los que se había desplegado un dispositivo especial formado por 1.703 agentes de Guardia Civil, Policía Nacional y policías locales. Eran catorce los partidos y coaliciones que ofertaban sus candidaturas, uno menos que en las anteriores, para designar a la docena de diputados autonómicos que le corresponden a la circunscripción almeriense. Sólo tres han conseguido representación en el Parlamento de Andalucía por Almería y uno ha sido el claro vencedor.