El Almería B sigue firmando una página de oro esta temporada y, pese a no contar con factor empate a favor en ninguno de sus dos choques de play off disputados en Estepona, ha sido capaz de llegar a la gran final nacional, tras deshacerse durante los 90 minutos del Huétor Tájar. Gilbert adelantó a los indálicos poco antes del descanso, pero el Huétor Tájar empató a la vuelta de vestuarios y achuchó mucho para hacer el segundo. El Almería B aguantó y, gracias al mucho veneno que tiene arriba, desniveló el partido con un buen chut de Lokosa en la recta final.

Óscar Fernández pudo alinear a su equipo de gala, el mismo que presentó en el encuentro de cuartos de final ante el Marbella, una escuadra muy compensada y que integra un cuarteto atacante de quilates, con Núñez, Marciano, Gilbert y Lokosa. Frente a frente, dos equipos muy goleadores y acostumbrados a atacar.

La tensión se notó en el primer tramo del partido, en el que el Almería B ejerció una presión alta muy efectiva. Con la srevoluciones, todos, todavía intactas, Lokosa perdió los nervios apenas a los 11 minutos y el colegiado lo amonestó con una amarilla que muchos se temieron que pudiera haber sido roja, tras empujar a un rival después de una entrada sobre Marciano.

El equipo almeriense estuvo muy firme tanto atrás como en la presión, lo que le permitió comenzar a tener el control de la posesión, aunque los acercamientos peligrosos de ambos equipos todavía tardarían hasta más allá del ecuador del acto.

Marciano, rodeado de rivales.

Rojas y Lokosa se mostraron muy activos de inicio, aunque si hubo un protagonista indudable fue Fuoli, que realizó dos paradones para mantener su arco a cero. El primero fue en el 25, con un tiro a bocajarro desde el interior del área. El segundo, diez minutos después, tras una buena jugada trenzada de los granadinos que dejó en un mano a mano con el arquero a Juanje, resuelto a la perfección por el guardameta.

El Almería B, como el Huétor, dio mucha sensación de peligro siempre que se acercó a las zonas delanteras. En el 27' Gilbert había pedido penalti tras un eterno caracoleo, y derribo, dentro del área, pero el colegiado se desentendió.

Y es que el choque comenzó a abrirse en el segundo tramo del primer tiempo, con ocasiones para los dos bandos que derivarían en el primero para el Almería B. Rojas hizo un jugadón en conducción y habilitó a Lokosa dentro del área, quien quisó chutar, pero le salió una asistencia perfecta para la entrada de Gilbert, que no perdonó ante Adri (40').

Carlos Gilbert, pichichi del Almería B y autor del 0-1.

Era capital defender la renta hasta el descanso y, por poco tiempo que quedara, el Huétor Tájar reaccionó muy bien y estuvo cerca de empatar con una doble ocasión de Utrilla. La primera la lanzó al lateral de la red en buena posición de tiro (45'), y la segunda, a segundos para el pitido, se estrelló en la cruceta de Fuoli tras un espectacular chut desde fuera del área (47').

Apuros... y gol de verdadero oro

El filial compareció muy enchufado tras el descanso, dispuesto a sentenciar el partido y comandado por un Rojas en modo jugón. Hasta tres intentos tuvo el atacante indálico en los primeros minutos, aunque sin éxito.

Pero el Huétor Tájar tenía todavía mucha mecha, y a poco que logró marcar el gol del empate puso en serios apuros a los chicos de Óscar. En la acción de la igualada intervino su hombre más inspirado, el habilidoso Utrilla, quien generó una opción de gol que derivó en varios rechaces. Lolo Armario cazó el cuero desde lejos y anotó un golazo ante el que nada pudo hacer, esta vez, Fuoli (58').

El gol espoleó a los amarillos, que buscaron con denuedo el 2-1, haciendo sufrir a un filial que ahora solo podía defenderse. Edu, que chutó fuera con todo a favor, perdonó el gol para los granadinos (69'). Por entonces el Almería B posiblemente habría firmado el empate para jugársela en la prórroga, ante el dominio del Huétor en esa fase.

Alegría de los chicos de Óscar Fernández.

Pero si algo tiene este equipo, aparte de talento, es capacidad de pelea y sacrificio, que se conjuga con su gran pegada arriba. Lo certificó en el tramo final, pues antes de anotar Lokosa ya pudo haberlo hecho Rojas después de un buen centro de Fermín, pero su disparo fue defectuoso con todo a favor. Daba igual. Lokosa sí acertó con un buen chut en la siguiente, a falta solo de ocho minutos para el final.

Óscar 'jugó' con los cambios en los últimos minutos y el Almería B se pertrechó para defender un botín que, en efecto, le permitió abandonar Estepona como el campeón de la fase autonómica del play off, un premio al trabajo de toda una temporada que, ojalá, se puede refrendar dentro de siete días con el ascenso a Segunda RFEf, en un fin de semana que puede ser de ensueño para la familia de la UD Almería