Con el césped del campo principal de Santo Domingo como fondo, el Club Deportivo El Ejido presentó este viernes a Rubén Alejandro Bouza, el tercer presidente que toma las riendas de la entidad celeste desde que fuese fundada en el año 2012. Nacido en 1961 en Capital Federal (Argentina), Bouza le toma el relevo en el cargo a Vicente Puertas, que pasará a centrarse en el fútbol sala. Ex futbolista y ex agente deportivo, el argentino ha estado trabajando desde abril en un CD El Ejido al que llegó "para apagar un incendio del presidente anterior (Pierre Mevy)".

Fue defensa en los años 80 en Chacarita Juniors, Los Andes y Argentinos Juniors, conjuntos de las dos primeras categorías del fútbol de su país natal. En 1993 entró a formar parte de Gold Players (Buenos Aires) como agente deportivo.

En el acto de presentación, que tuvo lugar en el palco del feudo ejidense, estuvieron presentes Javier Fernández, director general de la entidad, María José Martín, concejal de Deportes del Ayuntamiento de El Ejido, y Martín Doblado, delegado de la RFAF en Almería. "Es un día importante para este club, afrontamos con mucha ilusión esta nueva etapa y deseamos lo mejor al nuevo presidente. Hemos decidido hacer la presentación aquí porque nuestro proyecto es el verde y nuestro tejido empresarial son los invernaderos, que se ven ahí al fondo. Todos tenemos que crecer juntos", dijo Fernández.

"Soy un hombre de fútbol, pienso en fútbol. Cuando estudié el proyecto y vi la potencialidad no dudé en venir", dijo el nuevo máximo mandatario celeste, que destacaba que "la directiva de Vicente Puertas ha hecho un grandísimo trabajo tras una dura crisis". En relación a dicha situación, a los problemas que generó el paso del empresario israelí Pierre Mevy por el club, Bouza dejó claro que "nosotros vinimos a gestionar y la única manera de que este club sea grande es hacerlo con ingresos de la comunidad, del entorno. La meta final es hacer un club grande que se mantenga por sí mismo y que no necesite inversores extraordinarios por errores del pasado. Todos los clubes crecen despacio".

"La meta final es hacer un club grande que se mantenga por sí mismo y que no necesite inversores extraordinarios por errores del pasado"

Si en junio de 2017 Mevy aterrizó en El Ejido prometiendo el ascenso a Liga de Fútbol Profesional a corto plazo y la profesionalización de una entidad de la que finalmente salió por la puerta de atrás y a la que dejó muy tocada económicamente, Rubén Alejandro Bouza habló de un proyecto que, a priori, parece más realista y calmado, aunque no por ello menos ilusionante. "Queremos darle más importancia al equipo de juveniles, llegar a convenios con clubes de Argentina para traer jugadores sin portes y también con otros equipos de España. Este proyecto nos va a llevar tiempo y trabajo, pero soy un hombre de palabra. Ahora estamos al borde de estar muy contentos o muy tristes, encaramos dos finales por subir y es una oportunidad histórica. Esa es la primera meta, tener la suerte de ascender a Segunda B, que sería mérito de la directiva de Vicente Puertas", dijo.

Pese a tener los pies en la tierra, Bouza no escondió su ilusión y comentó que "si me dejan soñar el objetivo es Segunda A y que el día de mañana el chico que salió del CD El Ejido juegue en el Zaragoza, en el Villarreal o en el Real Madrid". El nuevo presidente del Club Deportivo El Ejido 2012 llega al Poniente almeriense con pasión, ganas de trabajar y siendo consciente de que le espera un largo camino para ganarse la confianza de una afición y una población ejidense que se ha llevado duras decepciones en el mundo del balompié.