Campeón made in ALMERÍA

Antonio Marín es granadino de Guadix, pero la afición rojiblanca lo siente como un almeriense más. No en vano enfila en la UDA su octava temporada, desde que David Vizcaíno lo reclutase siendo infantil de segundo año haciendo labores de scouting, arrebatándoselo al Villarreal.

El crecimiento de esta perla cultivada en las categorías inferiores unionistas ha sido parejo al de los escalafones inferiores de la selección, siendo un fijo desde categoría sub-16 y el domingo, en Grecia, obtenía el premio proclamándose campéon de Europa.

Un campeón 'made in Almería' que luce con orgullo el entorchado continental para un club que ve premiada de este modo su decidida apuesta por la cantera: "Sentirte campeón de Europa es una situación única que no se puede explicar con palabras. Poco a poco iremos asimilándolo", explicaba ayer Marín vía telefónica a Diario de Almería desde su casa familiar de Guadix, recién aterrizado de tierras griegas.

Consciente de su enorme potencial y del cortejo de novias que llamaban a su puerta, la UDA lo dejó bien atado antes de partir a la disputa del campeonato renovándolo por 4 temporadas más y haciéndolo jugador del primer equipo de pleno derecho: "El año pasado Sergi ya depositó gran confianza en mí con partidos clave y dándome minutos. Mi renovación en parte es porque sigue él, es un técnico muy bueno y eso me echó adelante".

Apenas se va a tomar una semana de descanso para incorporarse cuanto antes al stage que el equipo inicia el viernes en Asturias porque la idea de Marín es anotar un ascenso en su incipiente currículum: "El día de la renovación me sorprendió el cariño y la alegría que me demostró la gente por redes sociales. Lo percibí y eso me motiva para darlo todo y subir a Primera".

Todos los entrenadores que ha tenido en las distintas categorías destacan del accitano que tiene la cabeza muy bien amueblada para su edad, algo que salta a la vista cuando se le pide que analice el plantel que se está formando y los ambiciosos objetivos marcados: "Se ha mantenido un buen bloque y los refuerzos son buenos fichajes. Con el nombre no se va a ningún lado, pero sí con trabajo. Tengo ganas de ascender con el primer equipo, sería emocionante. Viví el descenso y son momentos malos, ojalá pueda quitarme esa espina".

Una vez en el primer equipo (lucirá el dorsal 18), ahora le toca la difícil misión de asentarse con una dura competencia por delante, con el brasileño Michel y Ximo Navarro, que al estar lesionado le dará tregua hasta diciembre: "Siguen los mismos del año pasado e intento aprender de ellos. Son grandes personas y futbolistas, la competencia es buena".

Buen amigo de Marco Asensio y Dani Ceballos, espera verse pronto con ellos en la liga de las estrellas, orgulloso de la alegría que le ha dado a sus padres.