Pocas sensaciones más desagradables que un neumotórax. Esa sensación de ahogo por la descompresión del pulmón al ser perforada la pleura es francamente agobiante. José Manuel Morales, una joven joya del judo almeriense, bien lo sabe. Tres ingresos hospitalarios con tres intervenciones por un neumotórax espontáneo, tienen la culpa. Un año complicado, muy complicado, que lejos de asustarlo, lo ha hecho más fuerte.
Sobre todo para un deporte como el judo que se basa en el contacto. El deportista de la EMD Alianza KSV ha olvidado el quirófano, el escozor de los puntos de sutura, la depresión de las noches hospitalarias, con un bronce que, ése sí, jamás olvidará. El día 6 de diciembre disputaba el Campeonato de España de Judo Absoluto en Madrid en el peso de 66k. El almeriense lograba cuatro victorias por una única derrota, lo que le permitó subirse al tercer puesto del podium nacional.
“Morales tiene una gran capacidad de trabajo, además de muchísimo talento. Cuando estaba en el hospital, se llevaba gomas al hospital para entrenar y los médicos alucinaban. En cuanto le dieron el alta, se puso a entrenar. Cualquier persona tarda un tiempo en levantarse cuando se cae, él lo hace rápidamente”, comenta su entenador León Granda, muy satisfecho por el éxito y por el chute anímico que supone esta medalla para el almeriense, que comenzó a entrenar judo en el Colegio Saladares a la edad de seis años y ya desde pequeño tenía claro que quería lograr éxitos.
El calendario que se le presenta es duro. Los objetivos para esta temporada son afianzar los resultados y tratar de lograr una buena clasificación para la European Cup de Slovaquia de finales de mayo. José Manuel Morales seguirá entrenando como el que más en dobles sesiones. Sus pulmones ya rinden como los de un campeón.
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