Lucas Alcaraz toma las riendas del banquillo rojiblanco a partir del sábado

Alfonso García se ha decantado esta vez por la opción experimentada y Lucas Alcaraz se sentará en el banquillo unionista tras la disputa del Almería-Zaragoza de este viernes, que ya tendrá la ocasión de ver desde el palco del Estadio de los Juegos Mediterráneos. El acuerdo entre el club y el técnico granadino es total y a lo largo de la tarde está previsto que se oficialice, una vez firmado el contrato.

Sería la segunda etapa de Alcaraz en la entidad rojiblanca, por la que pasó en el curso 2011-2012, justo tras caer a Segunda tras el primer paso por Primera División. Entonces aguantó hasta la jornada 32, cuando era sustituido por el Boquerón Esteban cuando el equipo era quinto clasificado con 55 puntos, si bien entonces los objetivos eran bien distintos a los actuales, ya que se luchaba por el ascenso directo.

Ahora llega poco menos que para resucitar a un muerto. El club da un giro de 180 grados en el perfil del inquilino del banquillo, ya que pasa del pregonado toque sin resultados postulado por Luis Miguel Ramis al gusto por el juego equilibrado y directo, con orden defensivo que estila Alcaraz. La intención es que logre hacerse con un vestuario que devora entrenadores con una facilidad inusitada y reflote la nave.

Su último cometido como técnico fue el cargo de seleccionador de Argelia, a la que no pudo clasificar para disputar el Mundial de Rusia. En sus inicios, Alcaraz también entrenó en la provincia a la AD Adra y al Almería CF, por lo que es bien conocido por la afición almeriense.