Mimos para el Mediterráneo

Para que cada fin de semana el Estadio de los Juegos Mediterráneos esté lo mejor posible, una brigada de trabajadores se afanan a diario para cuidarlo. El que fuera el diamante de la corona del verano de 2005 recibe todo tipo de mimos y carantoñas a diario para que las basuras no se acumulen en las gradas, para que los jardines colindantes estén aseados y bien cuidados y, sobre todo y lo más importante, para que el césped del terreno de juego se mantenga en perfecto estado.

El verano siempre es la época más complicada del año porque las altas temperaturas y la humedad provocan que las enfermedades se transmitan al verde. Los hongos enferman el césped y su cuidado es francamente complicado. En los partidos ante el Xerez y el Real Madrid Castilla se pudo ver las secuelas que ha dejado el período estival, mientras que ante el Murcia ya estaba algo remendado. Y es que Antonio Jesús López, Pepe Morales y Mariló están realizando con todo su esmero una resiembra, que desarrollará su segunda fase tras el partido ante el Guadalajara de este sábado. El asesoramiento a los tres encargados del mantenimiento del césped procede de la misma empresa que cuida los terrenos de juego del Barcelona o del Hércules.

Antonio Jesús explicó que el césped ha mejorado algo tras la primera resiembra, pero todavía falta tiempo. "Está recuperándose poco a poco. Hemos resembrado, pero la planta no está todavía con la densidad que se necesita. Ahora mismo está en un cincuenta por ciento de como debe estar. Tras el partido de este sábado volveremos a resembrar y creo que para la siguiente jornada que el Almería juegue aquí habrá dado un gran cambio", dice el encargado que valora los principales problemas son meteorológicos: "En Almería el calor y la humedad provoca que aparezcan muchas enfermedades. Además, también tenemos un tipo de hierba propia de invierno".

El proceso de resiembra que está teniendo el Mediterráneo requiere un trabajo y unos cuidados constantes. "Hacemos un proceso de primera recuperación: echamos fungicidas para los hongos, rajamos la superficie para meter la semilla y después echamos la arena. La semilla tarda unos cinco días en explotar para que salga la planta. Por eso ahora mismo todavía no ha engordado, no tiene la densidad que necesita y en el partido del pasado martes muchos tallos se quebraron".

Antonio Jesús agradece a Javi Gracia el especial cuidado que está teniendo para que el césped se recupere cuanto antes. La primera plantilla no pisa demasiado el estadio principal en sus entrenamientos y la brigada de mantenimiento se encarga de hacer su función. "Por la mañana revisamos los dos campos para ver que no se está propagando ninguna enfermedad: quitamos las malas hierbas, pinchamos, cortamos, arreglamos... Cuando los jugadores terminar de entrenar, arreglamos los desperfectos que se han producido en la superficie. Nosotros solemos decir que el campo nos suele hablar y nos dice lo que necesitamos", explica un Antonio Jesús que quiere sacar a relucir la importancia de un estadio muy bien valorado por los rivales cuando vienen a jugar a Almería: "Este césped ha sido uno de los tres mejores de España, aunque ahora estamos en unos meses complicados en los que hay que cuidarlo mucho", finaliza el encargado de mantenimiento, que ahora tiene trabajo extra porque ha de poner también a punto el terreno de juego del Juan Rojas.