Pese a que el club aún no lo ha oficializado, de sobra se conoce que Darío Hernán Drudi es el encargado de la dirección deportiva de la Unión Deportiva Almería, que está en los comienzos de una, por el momento, apasionante etapa de la mano de su nuevo propietario, el saudí Turki Al-Sheikh. Junto con Mohamed El Assy, que ya ejerce oficialmente de director general de la entidad almeriense, Drudi ha llegado como otro de los hombres fuertes del ambicioso proyecto que se trae entre manos el jeque. Su labor, sin duda alguna, es de vital importancia estos días, ya que es el encargado de dar los vistos buenos a los fichajes de esta nueva UDA, esos que tanto ansía empezar a conocer la afición, ya que el inicio de la competición está a la vuelta de la esquina. Es por ello que todas las miradas se centran ahora en su complicada labor de cerrar la planificación del plantel rojiblanco, uno de garantías que haga mantener la ilusión que está generando la revolución árabe que ha llegado al Mediterráneo.

Los trámites que ha tenido que hacer el club para obtener toda la documentación necesaria por parte del Consejo Superior de Deportes (CSD) para poder fichar e inscribir a jugadores han retrasado un proceso que Drudi , como es lógico, lleva preparando en la sombra desde que aterrizó en Almería. Pese a que aún no han trascendido nombres de forma clara, ya tendría negociaciones avanzadas e incluso algunas prácticamente cerradas con varios futbolistas, ya que su máxima prioridad ahora mismo es la de traer las piezas que le faltan al puzzle rojiblanco para, como mínimo, poder afrontar sin problemas el primer tramo de esta temporada 2019-2020.

Drudi en el Mediterráneo.

Pese a que tiene solamente 32 años, el de Buenos Aires cuenta con un bagaje de prácticamente una década, algo que inspira cierta confianza, que minimiza en cierto modo el ambiente de incertidumbre que ha supuesto que la UD Almería, tras casi 17 años, haya cambiado de manos, y además de cuerpo técnico a una semana y poco del comienzo liguero. Con 16 años, Drudi trató de hacerse futbolista en el Gandía , (2003-2007), pero decidió cambiar de parcela para intentarlo como entrenador en el propio club valenciano, con 24 años. Antes de cumplir los 26, el argentino ya ejercía como responsable de análisis de los rivales en la cantera del Villarreal.

En la entidad de El Madrigal trabajó con los técnicos Julio Velázquez, Lluis Planagumá, que precisamente sonó para la UDA para este curso que se avecina, y con Marcelino, siendo responsable del departamento de análisis táctico del Villarreal en esa última etapa en la que los amarillos lograron de nuevo el ascenso a la Primera División.

Dejaría Drudi el fútbol español en 2016 para marcharse un par de años a Ucrania, donde tuvo diferentes ocupaciones técnicas en el Zirka Kropyvnytskyi y el Karpaty Lviv, dando en esta última entidad sus primeros pasos en la parcela de la dirección deportiva (2017-2018). Ese año, cabe destacar, también pasó, aunque por un período muy breve de tiempo, por el staff técnico del Mónaco, siendo el Pyramids egipcio, donde se ganó la confianza de Al-Sheikh, su último destino antes de recalar en la Unión Deportiva Almería.

En principio, su experiencia como asistente, analista técnico, entrenador y director deportivo le avalan como profesional, aunque el reto de ser responsable de la planificación del plantel rojiblanco es más que complicado para Drudi, ya que tiene poco margen de tiempo para realizarla dadas las fechas en las que la riendas de la entidad almeriense han cambiado de manos. No contará con la ayuda de Corona ni Iban Andrés, a lo que se les ofreció seguir bajo el mando del argentino, pero ambos rechazaron la oferta. En solitario, con la liga a las puertas y con las fijas miradas de una afición expectante, Darío Drudi trabaja bajo presión, a marchas forzadas, para que el proyecto de Turki Al-Sheikh pueda arrancar esta campaña con el mejor pie posible sobre el césped.