La maldición del 'Daily Programme'

Estar en la portada de una revista ha pasado de ser un motivo de orgullo a una calamidad en el Mundial de atletismo de Daegu. La rusa Yelena Isinbayeva fue ayer la última víctima de la maldición del Daily Programme.

Primero fue el pertiguista australiano Steve Hooker, luego el esprínter jamaicano Usain Bolt y un día después el vallista cubano Dayron Robles. Al igual que la reina de la pértiga, todos ellos ilustraron la portada del programa del día editado por la IAAF, y todos ellos fracasaron.

Isinbayeva fue la última decepción de un Mundial en el que los grandes favoritos están teniendo más disgustos que alegrías. La plusmarquista mundial fue sexta en una final de pértiga que se llevó la brasileña Fabiana Murer con un salto de 4,85 metros. "Si no hubiera estado en buena forma, no estaría aquí. Mi condición física era muy buena. Todo estaba listo para una victoria, pero no sé qué fue mal", dijo la rusa. La zarina hizo un nulo en 4,75 y dos en 4,80, muy lejos de las marcas que le llevaron a batir 27 récords mundiales, siendo el último en 5,06 metros. Su crisis de confianza se prolonga un campeonato más, a sólo un año de los Juegos Olímpicos de Londres. Isinbayeva saludó al público y se marchó de lo que fue su regreso tras el fiasco del Mundial de Berlín 2009, donde no superó el listón a ninguna altura.

El primer día de competición, Hooker, campeón mundial y olímpico en pértiga, sorprendió al quedar fuera de la final tras fracasar en sus tres intentos sobre 5,50 metros. El punto final a una temporada plagada de lesiones.

Infinitamente mayor fue la conmoción que causó la eliminación de Bolt en la final de los 100 metros por salida nula. El plusmarquista mundial, campeón olímpico y defensor del título mundial se fue de la pista sin ni siquiera correr.

El regalo lo aprovechó su amigo y compañero de entrenamientos Yohan Blake, que se convirtió a los 21 años en el campeón del sprint más joven de la historia. Bolt todavía no ha dado explicaciones. Se limitó a enviar un comunicado escrito de lo más aséptico.

Robles cruzó al menos la meta, y lo hizo en primera posición, pero los jueces lo descalificaron por obstruir dos veces con el brazo al chino Liu Xiang. El oro fue para el estadounidense Jason Richardson y el plusmarquista de los 110 metros vallas se quedó sin completar su ansiado círculo, uniendo el título en Daegu al olímpico, el panamericano y el mundial indoor.

Hoy sólo está en el programa los 20 kilómetros marcha femeninos, donde la gran favorita es la rusa Olga Kaniskina, campeona del mundo en 2007, olímpica en 2008 y de Europa en 2010. ¿Será ella portada del Daily Programme?