Pablo Hernández, un ejidense en el cuerpo técnico del Getafe B

Desamiado cambiante puede resultar en ocasiones el mundo del fútbol, con continuos giros de guion cuando uno menos se lo puede esperar. Algo de lo que en los últimos años buena prueba de ello puede dar el técnico ejidense Pablo Hernández, quien durante este verano, y con la prematura salida el pasado curso del Motril todavía muy presente, en apenas unas semanas pasaba de disponerse a afrontar una nueva etapa en el banquillo del Villarrobledo, en Tercera RFEF, a sumarse como segundo entrenador al cuerpo técnico del Getafe B, de Segunda RFEF, que comanda Manu del Moral.

Y, casualidades del destino, coincidiendo ahora con uno de los entrenadores que el pasado curso tuvo el Motril y al que, a pesar de su corta estancia, bien pudo conocer durante su corto periplo en la localidad granadina. Y todo ello pasando de vivir la que sin la menor duda no tiene reparos en considerar su temporada "más dura a nivel personal como entrenador" a estar cada vez más cerca de tocar el fútbol profesional, ahora de la mano del jienense y cuya nueva etapa no ha comenzado nada mal con esa victoria in extremis del pasado fin de semana ante el Navalcarnero.

Pregunta. ¿Cómo está llevando esta nueva etapa en el filial del Getafe?

Respuesta. La verdad es que está siendo una etapa muy emocionante, una oportunidad para seguir creciendo a nivel profesional. Llevaba mucho tiempo esperando tener una posibilidad así y la verdad que muy agradecido. En primer lugar a Manu Del Moral por la confianza que me ha transmitido y por la apuesta que ha hecho por mí. Y ahora intentando estar a la altura, intentando ayudarle lo máximo posible y ayudar al club también.

P. Es su primera etapa profesional en la Comunidad de Madrid, ¿cómo lleva la adaptación a su nueva ciudad?

R. Ya tuve una etapa en la que estuve viviendo aquí temporalmente por el nivel 3 que tuve que sacarme aquí el curso nacional de entrenador. Pero es cierto que no había estado nunca en Getafe viviendo. Es la primera vez que estoy aquí en la ciudad y muy contento. Vivimos relativamente cerca de la ciudad deportiva. Estamos conviviendo juntos tanto el entrenador como el preparador físico y yo, los tres. Eso también ayuda a que la adaptación haya sido mucho más fácil, ya que los esfuerzos que estamos realizando a nivel personal los tres, de dejar a personas queridas allí en nuestras ciudades que no se note tanto o que entre los tres podamos apoyarnos el uno al otro. Nos hemos venidos los tres solos tanto Manu como Esteban, el preparador físico y yo. La verdad es que está siendo duro en ese sentido porque cada uno tiene su vida, cada uno tiene a sus personas cercanas. No solo familia, pareja, amigos. Al final no es fácil cambiar de ciudad y hacerlo solo. Pero como ya te digo, creo que el hecho de vivir juntos y de haber venido los tres de la mano nos está ayudando mucho a llevar la situación más adelante.

Pablo Hernández: "Surgió cuando menos me lo esperaba"

P. ¿Cómo le llegó la propuesta de incorporarse al cuerpo técnico de Manu del Moral, de hecho ya había firmado con el Villarrobledo?

R. Surgió cuando menos lo esperaba. Es cierto que en el mes de junio cuando se anuncia que Manu iba a ser el nuevo entrenador del Getafe B tenemos una conversación, hablamos. Él me transmite la posibilidad de que yo pueda ir allí con él. Pero es cierto que hay un segundo entrenador de aquí, de Madrid, que tenían que esperar a ver qué respuesta daba. Finalmente aceptó y no se dió en ese momento. Luego, semanas más tarde, a mí me aparece la oportunidad de Villarrobledo, un club histórico en la Tercera División de Castilla-La Mancha y era una oportunidad muy bonita que acepté con muchas ganas. Era un reto que tenía muchas ganas de vivirlo. Al final no se ha podido dar porque creo que fue el 13 de julio cuando recibo la llamada de Manu Del Moral porque este segundo entrenador que te comento finalmente marcha para otro equipo, otro proyecto y se acuerda de mí y la verdad que no lo pensé mucho.

P. ¿Cómo toma esa decisión de dejar el Villarrobledo y afrontar esta nueva etapa en Getafe?

R. Es cierto que fue una decisión difícil a la hora de comunicarla porque tuve que hacer frente a dar explicaciones a personas que me habían dado confianza y me habían dado una oportunidad y eso siempre es difícil. Pero a la hora de decidir a nivel deportivo y a nivel profesional lo que quería, lo tuve muy claro desde el minuto uno cuando me entró la llamada de Manu. La verdad que no lo dudé en ningún momento porque era una oportunidad a nivel profesional que no podía dejar escapar, ya no solo por las posibilidades de crecer y por el día a día y el contexto que tenemos aquí, el estar en un club de Primera División, sino porque creo que vengo de la mano de una persona súper reconocida en el mundo del fútbol, con una proyección como entrenador importante, joven y luego a nivel personal también tenemos una relación y las semanas que estuve en Motril también sirvieron para sacar algo positivo y una de las cosas positivas fue conocer a Manu, conocer a Esteban. El destino o las cosas del fútbol, un año más tarde nos ha vuelto a juntar y estamos ahora trabajando juntos de nuevo.

P. ¿Cómo ha vivido esta última temporada que tras su prematura salida del Motril la ha tenido que pasar prácticamente en su totalidad sin equipo?

R. Tengo que ser sincero, creo que ha sido la temporada más dura a nivel personal que he tenido como entrenador. Difícilmente creo que vaya a tener una experiencia tan dolorosa como la que tuve en Motril. Sinceramente no entendí nunca la decisión, ya no de echarme sino de firmarme. Creo que cuando tú firmas a una persona tienes que darle confianza y yo en ningún momento noté confianza por parte de las personas del club. Es cierto que duró poco la relación, nos dimos cuenta rápidamente que no era lo que buscábamos el uno y el otro. Es decir, las dos partes creo que nos dimos cuenta de que no íbamos en la misma dirección. Yo tengo una manera de trabajar, tengo una forma de pensar y tengo claro que las cosas cuando uno tiene un trabajo tiene que hacerlas también a su manera y tener libertad para poder ejercer su trabajo. Si no tiene esa libertad creo que lo mejor es que cojamos caminos diferentes y así fue. Lástima la forma y las maneras porque creo que no fueron las correctas. Al final el que ha pagado los platos rotos he sido yo que he estado un año sin poder trabajar, sin poder hacer lo que más me gusta y ahora ya está. Es una etapa que ha pasado, estoy centrado en mi futuro, en seguir creciendo y confiando en mi trabajo y en mí como siempre hecho.

P. ¿Qué fue lo más complicado de tomar la decisión de dejar al Villarrobledo, puesto que le dieron su confianza?

R. Creo que al final lo que más cuesta en este tipo de situaciones es decirle a personas que tenían ilusión, que tenían confianza en ti que no vas a poder cumplir con lo acordado, que no vas a poder iniciar el proyecto que ellos te han encomendado y eso era un poco lo que más me preocupaba. Cierto es y en honor a la verdad tengo que decir que me lo pusieron muy fácil, el trato que me dieron fue excepcional. Les deseo lo mejor, que sigo teniendo contacto con el director deportivo y sigo muy atentamente al Villarrobledo porque también dejé muchos fichajes hechos de jugadores que yo conozco y que le deseo lo mejor tanto a los jugadores como al club.

P. Exactamente varios de sus fichajes llevaron su sello, llegando varios almerienses o relacionados con Almería.

R. Sí, de la provincia de Almería creo que han sido cinco jugadores los que finalmente han ido para allá. Junior, Luis Vaz, Gonzalo, Navarro, Eteki que no es de la provincia, pero estuvo ya en El Ejido y lo tuve como jugador y luego algún jugador más que conocía y que también realicé el fichaje junto con el director deportivo, evidentemente.

"Para nada me siento menos que cuando era primer entrenador, también es cierto que estuve dos años como segundo entrenador en El Ejido"

P. ¿Qué funciones desempeña como segundo entrenador del Getafe B? ¿Cambia mucho sus labores con respecto a cuando era primer entrenador?

R. Evidentemente siempre cambia, cuando eres primer entrenador la responsabilidad es mucho mayor, tienes que hacer frente a situaciones distintas a las que tienes que hacer como segundo, pero es cierto que a nivel de confianza, de día a día, de las funciones en cuanto a los entrenamientos no puedo estar más agradecido y más contento que estoy ahora mismo por como Manu me ha dado confianza, por todo lo que me transmite y la verdad que en ese sentido es muy agradecido. Para nada me siento menos que cuando era primer entrenador, también es cierto que estuve dos años como segundo entrenador en El Ejido en Segunda División B. Ahora he tenido la suerte de estar con Manu del Moral que me lo está poniendo muy fácil, que confía mucho en mí y eso también es agradecer cuando estás como segundo entrenador.

P. Como comentaba precisamente ya cuenta con experiencia como segundo entrenador. ¿Le está viniendo bien esa experiencia previa?

R. Es un rol que ya conocía, es un rol que me hace también sentirme muy cómodo. También voy en la misma línea que tiene el entrenador en cuanto a la ideas y la forma de ver el juego. También el que el entrenador te dé tanta confianza, que te dé tantas responsabilidades día a día y que te dé peso en las funciones eso hace que uno también se sienta importante y realmente el puesto que ocupo es lo de menos. Creo que al final aquí no se trata de quién es primero, quién es segundo, quién es preparador físico. Aquí estamos todos para sumar, estamos todos para intentar hacerlo lo mejor posible para ayudar al club, ayudar a los jugadores y eso es lo que tenemos en la cabeza y es lo único que nos preocupa.

P. ¿Nota muchos cambios entre entrenar a un equipo más pequeño a formar parte de un cuerpo técnico de un filial de un club de fútbol profesional?

R. Creo que la principal diferencia es que en el resto de clubes yo he sido profesional, pero quizás no me he sentido profesional y aquí uno es profesional y además le hacen sentirse profesional. Creo que esa es la principal diferencia, aquí te sientes profesional por el contexto, por las instalaciones, por el personal humano que hay dentro del club, por la profesionalidad que tienen todas las personas que forman el cuerpo técnico. Tenemos un cuerpo técnico muy amplio de catorce o quince personas, cada uno tiene su rol. La verdad que en el día a día no falta de nada en cuanto a material, en cuanto a recursos y evidentemente está claro que la diferencia es bastante notoria en ese sentido.

P. ¿Cómo afrontan la temporada, que comenzaron con victoria ante el Navalcarnero el pasado fin de semana con el equipo?

R. Tenemos claro que el principal objetivo de un equipo filial no deja de ser ayudar al primer equipo. Nosotros lo que tenemos que intentar es que en el día a día los jugadores estén lo mejor posible, que mejoren individualmente y colectivamente para cuando el míster del primer equipo requiera de ellos como en las primeras jornadas ya tuvimos a Ismael debutando como titular en Balaídos y jugando 90 minutos que estén a la altura, que ayuden al primer equipo. Ese es el principal objetivo que tenemos. Luego a nivel deportivo evidentemente el filial lleva dos años consecutivos haciendo play off de ascenso a Primera RFEF. Es cierto que el club también este año ha cambiado la política. Años anteriores, siempre el club o el filial contaba con jugadores senior que complementaban a los sub-23 y este año ya somos todos sub-23. Todos los jugadores que tenemos en plantilla están por debajo de 22 años, incluso tenemos una base amplia de jugadores que están incluso por debajo de 20 años.

P. ¿Ha podido ya tener algún trato con el técnico del primer equipo, José Bordalás?

R. Sí, hemos tenido ya varias varias conversaciones con él. Es una persona que está haciendo un trabajo admirable aquí dentro del club, una persona súper querida en toda la ciudad y nosotros evidentemente acabamos de llegar al club y estamos a su disposición como así se lo hemos transmitido a él. También nos ha transmitido que está para ayudarnos y vamos de la mano en ese sentido tanto el cuerpo técnico del primer equipo como el del filial, buscamos todos lo mejor para el club que va a ser lo mejor para nosotros.

P. Además en el primer equipo cuentan con un almeriense como Coba da Costa. ¿Cómo ha visto la gran evolución que ha tenido en los últimos años?

R. Es un jugador que yo no lo he llegado a entrenar nunca pero que nos hemos enfrentado, que hemos coincidido en la cantera de la UD Almería. Un jugador al que le tengo mucha estima, yo también sé que él me la tiene a mí, hemos tenido ya varios encuentros aquí en la ciudad deportiva y la verdad que es una alegría el que personas de Almería podamos compartir el sueño que tenemos y que podamos dedicarnos a lo que nos gusta y además estando en el mismo club, la verdad que es una suerte y también un orgullo.

P. ¿Cómo está viendo desde la distancia la situación del fútbol almeriense, que sin duda pasa por un momento delicado?

R. Está claro esto, lo has definido muy bien. El fútbol almeriense está pasando por un momento crítico bajo mi punto de vista. Creo que en las cinco primeras categorías nacionales solo hay un club como bien dices que es el Pulpileño, que además juega en la Región de Murcia, que ni siquiera está jugando en Andalucía y el otro club que tiene dos equipos en categoría nacional o en las primeras cinco categorías es el Almería. Estamos hablando de 600 equipos quizás que haya entre toda la Tercera RFEF, la Segunda RFEF, la Primera RFEF y la Segunda División y Primera división y solo tenemos dos clubes y uno de ellos está jugando en Murcia. Creo que con eso ya son datos bastante contundentes para hacerse una idea de la situación actual que hay en el fútbol almeriense.

P. A medio y largo plazo, ¿qué retos le quedan por cumplir en el mundo de los banquillos?

R. La verdad que he tomado una decisión de la cual estoy convencido y voy a ser consecuente con ella, que es la de incorporarme al cuerpo técnico de Manu del Moral y mi idea a partir de ahora no es otra que ayudarle, acompañarle en su carrera, estar el mayor tiempo posible juntos, hacerle llegar o que pueda tocar el fútbol profesional como entrenador y yo evidentemente disfrutar de esa oportunidad porque al final es un poco lo que siempre he querido y el reto que he tenido.