Lo bueno de haber logrado el ascenso directo es que la UD Almería ha podido anticipar multitud de operaciones que tenía sobre la mesa sin la premura de las dos temporadas anteriores, cuando la planificación deportiva quedó suspendida un par de semanas por la disputa de las eliminatorias de ascenso. De hecho será la primera vez que los hombres de Turki Al-Sheikh podrán confeccionar el plantel sin sobresaltos, ya que en 2019 llegaron a principios de agosto y tanto 2020 como 2021 estuvieron marcados por el coronavirus.  

En este tiempo el club ha anunciado la marcha de Giorgi Makaridze, Aitor Buñuel y Nelson Monte. Todos tenían en común que cumplían contrato y no han renovado sus compromisos contractuales. Del mismo modo se trabaja en la rescisión del año automático que Daniel Carriço obtenía debido al logro del ascenso y pese a haber disputado poco más de 200 minutos.

En el capítulo de altas el club también se ha movido con celeridad para renovar a Álex Centelles hasta 2026 y a Rodrigo Ely (2024), mientras que ha ejecutado las opciones de compra sobre Álex Pozo (2027), Srdjan Babic (2026) y abonado el canon a Vélez Sársfield para tener ya el 80% de la propiedad de Lucas Robertone.

La columna vertebral del equipo se mantiene y como quiera que hasta el próximo 1 de julio no se abre oficialmente la ventana de fichajes, este verano se encara de otra forma la posibilidad de reforzar el plantel, que hoy por hoy necesita un portero que compita con Fernando, un defensa central que haga lo propio con el trío Ely-Babic-Chumi a la espera de lo que el club decida con el serbio Maras y un delantero centro.

En la portería el nombre que más ha sonado en las últimas horas ha sido el del portugués Maximiano, enrolado en el Granada CF y por quien el conjunto nazarí pide 10 millones de euros negociables. Según ha podido saber este periódico es un guardameta que gusta, pero no sería la la opción número 1. Llegará, eso está claro, un arquero con experiencia bien en Primera o en una gran Liga que sea capaz de ponerle las cosas difíciles a Fernando, Zamora de Segunda y que hoy justo cumple 32 años, la edad de plena madurez para el puesto.

Tampoco hay excesiva prisa por encontrar el central que complete la terna para el retorno a la máxima categoría. Ely y Babic acabaron el curso a un gran nivel y cuentan con experiencia suficiente como para tener garantías suficientes en la demarcación, sin olvidar que Chumi estará al 100% para hacer la pretemporada y Rubi confía mucho en sus cualidades. Hasta la fecha, el mayor interés en la retaguardia se ha centrado en el lateral zurdo Arnau Solà, que cumple contrato en el Barça B y llegaría libre.

La última prioridad a día de hoy, y esto no quiere decir que solo vayan a acometerse tres contrataciones, porque en función de que vayan concretándose salidas se irán produciendo también otras entradas, es sin lugar a dudas el fichaje de un '9', pero el escenario cambia diametralmente en función de que Sadiq Umar continúe o no un año más vistiendo la rojiblanca.

El ariete nigeriano ya ha dicho en declaraciones a medios de su país que su ilusión es jugar en Primera con el Almería, pero tanto el jugador como el propio club son conscientes de que una oferta suculenta (tiene una cláusula de rescisión de 60 millones de euros) haría replantearse las cosas a ambas partes.

En la hipótesis de que Sadiq continúe, el perfil buscado es el de un segundo delantero que compita con Dyego Sousa para dosificar al de Kaduna e incremente el nivel ante la casi segura cesión o rescisión pactada de Juan Villar, que no ha tenido mucha fortuna es su periplo como unionista. 

Si Sadiq terminase siendo traspasado todo cambiaría, pues entonces la dirección deportiva se volcaría en la búsqueda de un '9' de primera fila que asumiera sobre su espalda el peso de ser la referencia ofensiva del equipo para marcar entre 15 y 20 goles por campaña.