El Atlético Pulpileño logra tres puntos de verdadero oro en Melilla (0-1)

El Atlético Pulpileño dio este domingo un paso de gigante en la lucha por eludir la zona baja con una gran victoria en el Álvarez Claro de Melilla, donde realizó un partido muy serio en el que perdonó incluso una victoria más abultada, ya que falló un penalti al filo del descanso, cuando ya ganaba por 0-1. El protagonista de ambas acciones fue Juanra, autor del gol de cabeza a la salida de un córner y quien marró también la pena máxima. Pese a que el Melilla apretó mucho en la segunda parte, los almerienses defendieron bien y se aseguraron un triunfo que les da mucho aire en su lucha y les permite abandonar el puesto de promoción, superando además al Melilla en la tabla. El portero Erik, que sustituía a Héctor Pizana, fue el gran protagonista del segundo tiempo con intervenciones salvadoras

Sebas López tocó algo su equipo en relación al partido del miércoles, especialmente motivado por las bajas de hasta tres hombres de relevancia, el guardameta Héctor Pizana, el extremo Juanje y el delantero Casi. Además, dio descanso al lateral Nacho Ruiz, formando una defensa con Ardil y Primo en los laterales, acompañados por Cristian y Juanra en el eje. Devolvió al 11 a Andrés García, que lleó en el mercado invernal procedente del propio Melilla, mientras que Nacho fue el delantero centro, secundado en las alas por Areso y David Segura.

El choque fue muy igualado en su primer tramo, con ambos equipos intentando dominar la medular, posesión dividida y acercamientos al entorno del área que derivaron en saques de esquina para los dos, aunque sin consecuencias. Un pase teledirigido de Fer Rubio a Areso en el 3' derivó en un centro al área recahzado por la zaga en el primer acercamiento del Pulpileño.

Al paso por el ecuador del acto comenzó a romperse la igualdad y fue gracias a los ataques del Atlético Pulpileño, que derivarían en el 0-1. El primero en acercarse a ello sería Nacho López, con un a bonita chilena tras un centro de Javi Areso, pero el guardameta local realizaría un paradón para despejar a córner (23').

No podría evitarlo poco después, a la salida justamente de otro saque de esquina botado por Andrés García, que la puso perfecta en la cabeza de Juanra, quien peinó para sorprender al arquero y subir el 0-1 en el marcador.

La réplica la quiso dar pronto el Melilla en la que significaría su mejor ocasión y casi única del primer tiempo. el central Vargas envío un pase en largo hacia la frontal bien controlado por Núñez, quien quiso batir de vaselina ante la media salida de Erik, pero el cuero se le fue fuera por milímetros cuando el Álvarez Claro ya canataba el gol (38')

Los norteafricanos habían perdonado el empate y los almerienses perdonarían acto seguido el 0-2. Participaron los mismos protagonistas del 0-1 en una acción que podría haber encarrilado de forma mucho más clara el partido para los de Sebas justo antes del descanso.

David Segura sacó una falta que fue rechazada por la zaga y le cayó a Andrés, quien lanzó un zambombazo desde la frontal que despejó bien Ballesté y le volvió a caer a Segura, quien de nuevo centró con peligro. El cuero iba a ser rematado cerca de la línea de gol por el propio Andrés García cuando fue derribado por un zaguero y el colegiado señaló penalti. Juanra sería el encargado de lanzarlo en la búsqueda de un doblete que no llegó porque Pol Ballesté, el mejor de los melillenses en la primera parte, le adivinó sus intenciones y despejó el cuero junto a su palo derecho.

Muchas ocasiones tras el descanso

El palo de fallar el penalti justo antes del descanso no pareció afectar al Pulpileño en el arranque de la segunda parte. Borja García chutó fuera de primeras tras un rechace de la zaga en el 47', para iniciar las hostilidades, y el Melilla respondió con un centro raso al área que despejó bien Juanra. Miguel Rivera, míster local, hizo dos cambios en el descanso en la búsqueda de la reacción, mientras que Sebas lo movió muy pco después de la reanudación, cuando sentó a su mejor hombre, Andrés García , seguramente muy castigado físicamente, por Barrenetxea (53').

El segundo periodo fue mucho más activo en las áreas, a lo que ayudaba sin duda el resultado, con un Melilla más volcado en la búsqueda del empate. Fer Rubio se encontró con un defensa cuando chutó desde dentro del área para hacer el segundo en el 55' y el Melilla respondió con una si cabe más clara, cuando Íker se encontró un 'caramelo' a apenas dos metros de la línea de gol, tras un rechace de Erik a un tiro lejano, pero tropezó cuando fue a disparar y su envío se fue fuera (56').

Respondió el Pulpileño, que mostró claras intenciones de sentenciar el partido aprovechando el paso adelante de los locales. En el 62' un córner derivó, tras varios rechaces, en un gol anulado por presunto fuera de juego del Pulpileño, y en la siguiente acción Borgja García chutó demasiado flojo desde dentro del área para que parara Pol Ballesté en otra clara ocasión de los almerienses.

El ritmo de opciones en las áreas no se frenaría. El Melilla volverñia a tener otra muy clara en el 66', tras una falta lejana botada por José Antonio y bien rechazada por Erik, que estuvo ayudado por el palo cuando su rechace fue cabeceado por Vargas y estuvo a punto de convertirse en el 1-1.

A falta de 20 minutos el Melilla quería asediar a los de Sebas, que a su vez esperaban tener acierto a la contra para asegurarse la victoria. Y pudieron hacerlo en el 76' si el colegiado hubiera dado por válido un disparo que, aparentemente, traspasó la línea, tras una buena acción de David Segura y Barrenetxea. El portero intervinó en dos tiempos y la sacó in extremis dando la sensación de que el cuero había entrado. Las protestas del Pulpileño fueron intensas, pero no sirvieron de nada. Un gol 'fantasma' de manual.

El Pulpileño contuvo bien a un ansioso Melilla en lo sucesivo y el choque se encaminó al tramo final con siete de añadido por parte del colegiado. Barrenetxea, a la contra, pudo hacer el segundo en el 93', pero su disparo fue rechazado a córner por la zaga in extremis.

Y falataba por aparecer de nuevo un Erik que estuvo a la altura del titular del Pulpileño entre palos, Pizana. El arquero voló para hacer un verdadero paradón en la penúltima del Melilla, un cabezazo de Chabboura en el 96' que el gurdameta despejó a córner, y todavía intervendría de nuevo ante un postrero tiro desde la frontal de José Antonio, que también repelió con una buena estirada para acabar de facturar los tres puntos de oro para el Pulpileño.