Las Harley-Davidson dominan la carretera

Más de treinta motos de esta marca recorren las calles con su ruido clásico. Los curiosos que se acercaban a conocerlas miraban con admiración todas sus piezas

Los participantes en la categoría de cachorros esperan el veredicto del jurado.
Los participantes en la categoría de cachorros esperan el veredicto del jurado.
Izan Guerrero / Almería

21 de agosto 2012 - 01:00

Más de una treintena de Harley- Davidson se citaron ayer en la tienda oficial de las motos para una concentración de colosos de este modelo de las dos ruedas y una ruta por la ciudad que encandiló a su paso a las personas que caminaban por las calles. Resultó difícil no distinguir a los moteros antes de la salida, las piezas de cuero no faltaban en los atuendos de los aficionados: chalecos, gorras, guantes y boinas daban un toque peculiar a la cita.

Las Harley-Davidson se juntaron ayer y recorrieron la capital con sincronización desde la primera a la última curva. Para los asistentes el mensaje era el mismo y el motivo por el que se encontraban allí radicaba en un modo de percibir la vida y la forma de transportarse en carretera: "Cuando Dios creó el mundo en siete días se dio cuenta de que se le olvidó una cosa, crear la Harley-Davidson, por eso realmente el mundo lo hizo en ocho días", rezaba exultante un asistente que sonreía en su moto al igual que un niño pequeño el seis de enero al despertarse.

Existe una gran afición a las motos en Almería, pero no todos los admiradores de las dos ruedas lo son con una Harley Davidson, se podría decir que pasear por el Parque Natural de Cabo de Gata con una moto de estas características es jugar en la primera división de los moteros.

Cada miembro se siente orgulloso, cada moto está cuidada hasta el más mínimo detalle, todos los asistentes tienen una historia curiosa con su moto, que prácticamente forma parte de su familia. Para Francisco Castro, uno de los presentes en el día de ayer en el asfalto, "el sueño para cualquier persona a la que le gusten las motos es tener una Harley Davidson", señaló el motero.

Otros devotos de esta práctica motera intercambiaban impresiones sobre sus motos, unos miraban con admiración las motos de otros y la suya propia, otros echaban un vistazo al interior de la tienda para sondear una futura compra, al mismo tiempo que luchaban contra el calor incesante de la ciudad con líquidos bien fríos para refrescar sus gaznates y quitarse así la sed veraniega del sol almeriense.

Uno de los objetivos de esta II edición de la Ruta Harley-Davidson por las calles de Almería durante la Feria de la ciudad era el de desmitificar la imagen que la sociedad ostenta sobre el colectivo de aficionados que poseen una moto de esta estructura.

El estereotipo del tipo duro americano con perilla y la bandera de Estados Unidos presidiendo su motocicleta, hace que las personas piensen que se necesita un carácter y un talante determinado para formar parte de este tipo de concentraciones. En la cita de ayer de los moteros, el discurso y la forma de ser y de actuar de los asistentes, hacían que esta corriente de pensamiento se encontrase bastante equidistante de lo que realmente es necesario para acudir y compartir un buen rato de moteros: una Harley-Davidson y ganas de pasarlo bien.

Los participantes querían compartir por segunda vez en la Feria de Almería sus motos con el resto de ciudadanos. El recorrido comenzó en la tienda oficial de Harley Davidson en Almería, en calle Manuel Azaña, finalizando con un estacionamiento en el centro de la ciudad para, posteriormente, disfrutar del ambiente de la Feria del Mediodía y poner así el broche de oro al día.

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