Cosas que tienes que saber si vienes a la Feria de Almería y eres de fuera...

El almeriense de a pie, ya sea capitalino o de cualquiera de sus municipios, se conoce la Feria de Almería al dedillo, sus secretos, lo que hacer, lo que no, dónde ir, un manual llamado experiencia, vaya. Pero si eres de fuera y aún no conoces los entresijos de esta característica celebración de agosto en honor a la Virgen del Mar, Diario de Almería te cuenta rápido y breve de qué van estas fiestas y cómo disfrutar de ellas de la mejor manera. Una completa guía que comienza con asistir esta misma noche al Pregón, que tendrá lugar en por primera vez en el recinto ferial de la Vega de Acá previo al encendido del alumbrado extraordinario. El Real de la Vega de Acá es donde convive la música, la gastronomía, el ocio y la cultura desde este viernes hasta el sábado día 30.

Si eres de fuera lo primero que debes tener claro es cómo va eso del transporte y cómo ir a la Feria. El autobús es tu mejor baza si te estás hospedando en la capital gracias a la línea F que se habilita durante toda la Feria de Almería, con un precio de 1,30 euros (si andas regular de presupuesto y te quieres ahorrar unos céntimos, la línea 7 sale desde Piedras Redondas, recorre la Rambla Federico García Lorca, parte de la Avenida Cabo de Gata, Cortijo Grande y la Vega de Acá para desembocar en su última parada del trayecto prácticamente al lado del recinto ferial, en la calle de atrás). Si optas por ir en vehículo particular, también se han habilitado zonas de estacionamiento en los alrededores del ferial.

Hay dos conceptos muy diferentes de la Feria de Almería. La Feria que transcurre en el centro y sólo durante el mediodía, y la que se vive en el Recinto Ferial, que arranca desde bien temprano, aproximadamente desde las 18:00 horas con los cacharricos, fiestas infantiles y otros espectáculos como el circo, y se apaga de madrugada.

Una cosa importante y que debes tener claro sobre la Feria de la capital almeriense es que no hay caseta mala, así como no hay caseta que tenga permitida el cobro por acceder a ella. El acceso a todas las casetas es completamente libre (excepto una que es privada) pero será habitual, sobre todo en los días de mayor afluencia, encontrar colas largas en algunas de ellas, las más aclamadas y solicitadas, habitualmente las que cuentan con aire acondicionado...

Si eres de los que prefiere llegar pronto al Real con la intención de cenar allí, son muchas las casetas que ofrecen diferentes degustaciones gastronómicas. Son las llamadas casetas tradicionales, aunque también están los típicos puestos ambulantes en los que se pueden degustar patatas, cofres, churros...

Otro consejo: imprescindible comprarse un abanico. Serán dos, tres o cuatro euros bien invertidos si no has podido acceder al emblemático abanico de la Feria de Almería que el Ayuntamiento ha repartido en los días previos. Las altas temperaturas, las aglomeraciones, el baile... El abanico es un complemento de lo más útil a la par que elegante para estos días de celebración.

Lleva efectivo. En esta era donde pagar con tarjeta o móvil es ya lo habitual, algunos feriantes se resisten y te puedes encontrar con la necesidad de pagar en efectivo. Saca algunos euros para prevenir hacer una larga cola y después tener que darte media vuelta.

Y tras finiquitar estos consejos, queda la vuelta a casa tras cerrar la jornada de Feria en el Real de la Vega de Acá, seguramente ya de madrugada. Los taxis se convierten en una misión imposible solo apta para aquellos con paciencia y poca prisa, pero también están las líneas de autobús que salen desde el recinto ferial con una frecuencia de líneas óptima y enlaces con los diferentes barrios de la periferia de la ciudad.

Una ruta por la ciudad en el tren turístico será un buen fin de fiestas. No te lo pierdas.