La salida del Reino Unido de la Unión Europea, con los consecuentes acuerdos comerciales y migratorios, está teniendo unas consecuencias que ya impactan en la vida diaria de los ingleses en algo tan rutinario como llenar la cesta de la compra. Por un lado, el transporte de mercancías procedente de la UE ya no es tan sencillo, los camiones no pueden cruzar libremente la frontera, los trámites en la aduana se alargan y la entrega de productos se retrasa; por otro, en cuanto a la mano de obra, las nuevas normas migratorias dificultan el trabajo para extranjeros en el Reino Unido. De hecho hace unos días, el Gobierno británico comunicaba que iba a ofertar 10.500 visados de trabajo temporales a transportistas y empleados de la industria avícola extranjeros, con el fin de asegurar el funcionamiento de la cadena de suministro y ‘salvar’ la Navidad.

La incertidumbre generada por esta situación y la ausencia de transportistas tienen también su impacto en una iniciativa que tenía previsto, tal y como anunciaba en junio Dirk Ghys, representante de la naviera belga Sealink Antwerp, arrancar este mes desde el Puerto de Almería: el envío marítimo de hortalizas frescas hacia el puerto de Portsmouth (Inglaterra). Esta línea de corta distancia, en la que se podrían cargar hasta 280 camiones, incluiría, en el trayecto de vuelta, el paso del buque por el puerto de Zeebrugge (Brujas, Bélgica), desde donde se pretende que los vehículos regresen a España con mercancías procedentes del área de influencia de dicho puerto para su distribución en España y en el norte de África. Con la carga de retorno se trata de hacer rentable el servicio, que es la consideración a la que apuntaba José Sánchez de Transportes J. Carrión: “Porque si hacemos el retorno con los semirremolques vacíos, podemos ser eficaces, pero no eficientes ni competitivos”.

El presidente de la Autoridad Portuaria de Almería (APA), Jesús Caicedo, alude a esta falta de conductores para el transporte de mercancías que llega a Reino Unido para justificar el aplazamiento de la nueva ruta. “Las empresas que pondrán en marcha el servicio marítimo Almería- Portsmouth lo tienen todo preparado, pero se encuentran con este contratiempo para poder iniciar el servicio”.

En este sentido también se manifiesta Daniel Pérez, responsable de Operaciones de J. Ronco & Cía, empresa consignataria en el puerto almeriense del buque que realizará los envíos, quien señala que las circunstancias sobrevenidas llevan a la puesta en marcha de la línea a un punto de stand-by. A la espera de la evolución de la situación y de que se despeje este escenario incierto, aprovecharán la cita de Fruit Attraction, que tendrá lugar esta próxima semana del 5 al 7 de octubre, para mantener distintas reuniones con los agentes implicados e ir abriendo camino para hacer posible la línea marítima.