En tiempos difíciles dicen eso de "reinventarse o morir", algo que le viene como anillo al dedo al sector del mármol, que está buscando nuevos caminos para poder seguir comercializando sus materiales. Ya no valen los acabados de siempre, ni los tratamientos que hemos visto a lo largo de los últimos años. Cuando el sector de la construcción sigue sin levantarse, recordemos que suponía el 33% de sus ingresos, hay que diversificar y ofertar nuevas propuestas.

El Centro Tecnológico Andaluz de la Piedra es el baluarte donde se apoyan las entidades de la Comarca del Mármol para poder seguir innovando. Esta vez ha sido la empresa Ferrer Arquitectos la que se ha dejado asesorar por sus conocimientos en el mundo de la piedra. Esta entidad es la encargada de diseñar el edificio matriz del PITA, Parque de Innovación Tecnológico de Almería, y tenían muy claro qué querían de este inmueble, pero no cómo conseguirlo.

El mármol de Macael es un material recurrente en los proyectos de la empresa desde hace años. Cualidades como su solidez, nobleza o durabilidad, siempre les han parecido adecuadas para el tipo de arquitectura que diseñan. José Ángel Ferrer, director general de Ferrer Arquitectos, piensa que los valores que transmite este material conectan muy bien con los que quieren reflejar en todas sus obras. "Tanto el PITA como Tecnova son un paradigma de innovación en muchas de sus actividades y el edificio debía reflejar necesariamente esos valores. El CTAP es un referente en Andalucía en todas las cuestiones relacionadas con la aplicación de la piedra natural. Al tomar la decisión de incorporar el mármol como material de fachada, entendíamos que debíamos contar con el Centro para que el resultado fuese el mejor posible. No queríamos una solución estándar, buscábamos algo innovador y el CTAP nos ha ayudado mucho para encontrar la idea adecuada", explica Ferrer.

Una propuesta innovadora, que se basa en una idea parecida a la de una fachada ventilada, pero con su propia personalidad. Nuestra solución, explica Ferrer, es una doble fachada donde la hoja exterior está formada por lamas de Mármol Blanco Macael. El carácter bioclimático de esta solución es consecuencia de las dimensiones y orientación de las lamas, que hemos diseñado para obtener el mayor ahorro energético posible en el edificio pero sin menoscabo de un alto confort de los usuarios. Desde el interior, a través de las lamas, se puede observar el paisaje que rodea el edificio a la vez que se evita la radiación solar directa en el interior.

La importancia que tiene el mármol en este proyecto es alta, pero no tanto por la cantidad sino por la forma innovadora en la que se va aplicar. Ahora están perfilando los últimos detalles del proyecto de ejecución y aún no saben con exactitud cuánto mármol necesitarán. En cualquier caso, será una importante cuantía, dada la envergadura del edificio que ronda los 20.000 metros cuadrados de superficie construida.

Nuestra mayor preocupación, comenta Ferrer, es que el inmueble responda a las necesidades funcionales para las que se ha diseñado. Que la gente trabaje cómoda y que sus condiciones, tanto funcionales como estéticas, puedan ser un elemento motivador más a la hora de asistir al trabajo. Por otra parte, esperamos que a nivel de sostenibilidad se comporte de acuerdo con los resultados previstos en el proyecto. Para la parte del edificio del PITA hemos obtenido la calificación A según Código Técnico, consiguiendo un ahorro energético de más de un 60% respecto de un edificio estándar, comenta Ferrer.

Un proyecto que han perfilado gracias a la colaboración que han mantenido con el CTAP. Desde el Centro le propusieron hacer un sistema de persianas que fuesen la propia fachada del edificio, y todo ello realizado en mármol blanco de Macael. El resultado es un inmueble acristalado, vanguardista y emblemático. Alfonso Cortés, responsable del área de innovación tecnológica del CTAP, explica que se ha elaborado un estudio de las protecciones solares convenientes para cada una de las fachadas que reciben la incidencia solar. "La suroeste y sureste, se ejecutarán mediante panel fachada en vidrio, protegido de la radiación solar mediante una celosía de lamas horizontales de mármol blanco de Macael, lo que nos dará como resultado un diseño innovador, que permita iluminar las estancias de forma difusa, sin que la incidencia solar sea directa".

Para un mayor aprovechamiento de las lamas, añade Cortes, se ha tenido en cuenta la interferencia de diversos factores como: el nivel de visibilidad, la radiación solar incidente o el número de horas de incidencia solar directa e indirecta. Desde la empresa de arquitectura tenían su requerimiento y nosotros les hemos propuesto soluciones. Hemos colaborado con especialistas en temas de fachadas y desarrollado lo que querían. El arquitecto lo diseñó y buscó soluciones técnicas. Ahí entramos nosotros", relata Cortés.

La idea partía de una base muy clara y es que tenia que ser en piedra para potenciar el uso de los materiales de esta tierra. Buscaban una fachada en la que se pudiese aplicar la belleza del blanco Macael, y el CTAP desarrolló la idea, concretamente el departamento de innovación tecnología, dentro del área de I+D+I.