Cajamar, en un foro nacional que analiza el futuro del sector primario

Los principales agentes del sector agroalimentario en materia de producción y comercialización de productos procedentes de la agricultura, la ganadería y la pesca participaron recientemente en un encuentro en Madrid para poner sobre la mesa las principales demandas del sector hacia la Administración, así como para exponer los retos a los que se enfrenta en el futuro más inmediato.

En una cita de esta importancia a escala nacional no faltó Cajamar, fiel a su compromiso y vocación por dar servicio a la industria agropecuaria. Fue Roberto García Torrente, director de Negocio Agroalimentario y Cooperativo de Cajamar, el encargado de representar a la primera cooperativa de crédito de España, en un acto organizado por la publicación especializada Qcom.es, celebrado en el hotel Westin Palace, al que asistieron más de 150 personas.

"Afortunadamente, la visión que se tiene del sector agroalimentario ha cambiado mucho en los últimos años. Se trata de un sector fundamental para la economía española, que ha aumentado notablemente su peso en el PIB nacional y ha mejorado su competitividad", apuntó García Torrente.

Además, el director de Negocio Agroalimentario y Cooperativo de Cajamar explicó que se trata de un sector que está despertando un interés inusitado en grandes inversores, que quieren invertir en él. "Cajamar ha estado, está y siempre estará apoyándolo. "Se trata de un sector apasionante, pero que para seguir creciendo en el futuro tiene ante sí varios retos: atraer a los jóvenes al sector para modernizarlo, incrementar el valor añadido y fortalecer y dar más competitividad a toda la cadena agroalimentaria", apostilló.

Junto a Cajamar, tomaron parte los representantes nacionales de las organizaciones agrarias Asaja, Coag y UPA; por parte de Asaja, su presidente, Pedro Barato, de Coag, Miguel Blanco, y de UPA, Lorenzo Ramos.

Asaja valoró la Ley de la Cadena Agroalimentaria, aunque dijo que "no conviene enredar más las cosas" y espera que se cumpla y que las cosas tengan un precio. "Necesitamos una estrategia de país para vendernos por el mundo", dijo.

Coag abogó por la autorregulación en cuanto a lo más básico del sector. "La previsión de precios es fundamental para consolidar la renta agraria y para ello hay que hacer una política de mercados acorde. Hay que centrar las ayudas de la PAC en el relevo generacional", dijo Blanco. UPA abogó por una mejora del entorno rural que luche contra la despoblación, con un modelo de agricultura familiar sostenible. "La venta a pérdida debe controlarse, regularse y sancionar, ya que se trata de una práctica muy extendida en la actualidad, que ha crecido con la crisis".

También participó Eduardo Baamonde, director general de Cooperativas Agro-alimentarias, que recordó la importancia de que la UE considere estratégico el sector agro, además de protegerlo en los acuerdos con países terceros. "Se tiene que regular también la volatilidad existente actualmente en los precios, ya que esto supone una rémora para la producción. Y hay que simplificar la PAC para dar seguridad jurídica", señaló.