El parqué
El mercado se recupera
Un año de investigación es el periodo mínimo que se requiere para conseguir encontrar la fórmula adecuada con la que crear un nuevo licor. Los hay de los más variados sabores: mora, manzana, café, melocotón, avellana...
Son muchas las empresas que los elaboran, otorgándole su toque especial. La mayoría se adscribe a lo ya hecho. Otras firmas, por el contrario, buscan la diferenciación a través de la utilización de materias primas más inusuales o el uso de técnicas innovadoras. Éste es el caso de la empresa Licores Artesanos Gómez, que comenzó su incursión en el mundo de las bebidas creando un producto atípico: el licor ecológico de higo chumbo Opuntia.
Elaborado con un 100% de productos naturales, supuso todo un reto empresarial. Su originalidad radicaba en una doble vertiente. Por una parte, se recuperaba este fruto típico almeriense para el consumo y, por otra, se volvía a retomar la técnica tradicional de maceración en alcohol, tan denostada hoy en día por la industria dada la complejidad que requiere su ejecución (el periodo de maceración del chumbo, por ejemplo, requiere entre 15 y 20 días, dependiendo del estado del fruto).
Corría el año 1999 cuando la empresa, propiedad de la familia Gómez, se decidía a acometer su particular aventura y, diez años más tarde, se prepara a implementar su gama de artículos con una nueva bebida, Vannilia, elaborada a base de vainilla; y otras dos variedades de tomillo y romero de origen ecológico.
Los productos, aún en fase de pruebas, se comenzaron a desarrollar en mayo del año pasado y, si todo sale según lo previsto, el lanzamiento comercial se llevará a cabo en Navidad, afirma Diego Gómez, gerente de la empresa.
Además, en las instalaciones ubicadas en Alhama de Almería se prepara ya un nuevo licor elaborado de manera artesanal a base de piel de naranja. "Haremos sólo la fabricación, nos lo ha encargado otra empresa de la provincia", comenta el gerente.
La fabricación de productos para otras firmas, la comercialización directa (en restaurantes, hoteles y pequeños comercios) o el lanzamiento de nuevas variedades de licores son algunas de las propuestas que está realizando Licores Artesanos Gómez para plantarle cara al "bajón" que ha dado el sector "desde hace un año y pico.
Y es que, desde que iniciaran la actividad empresarial, "ha cambiado mucho la cosa", comenta Diego Gómez. Como en todos los ámbitos económicos, la situación de crisis les está afectando, máxime si se tiene en cuenta que se trata de un artículo prescindible. "La cerveza es lo único que se mantiene y, a pesar de eso, ha bajado un 15%", asevera el gerente alhameño. "De lo primero que se ha quitado la gente es de los licores".
Junto a esto, existen otros condicionantes que dificultan la actividad de las empresas de bebidas alcohólicas. El mayor problema son las aduanas. Los altos precios que imponen los países extranjeros a este segmento agroalimentario gravan de manera exponencial los productos de importación, restándoles rentabilidad.
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