Mármoles Gonzalo Esteban, 30 años sacando lo mejor de la piedra natural

Gonzalo Esteban Fernández creó su propia empresa en el año 1973 y los principios, cuando algo arranca, fueron duros. Hay que recordar que en esa época no contaba con ningún tipo de ayuda al dejar el régimen general y pasar a ser autónomo. Ser emprendedor no estaba respaldado por las administraciones, como ahora. Pero eso no le importó y alquiló una fabrica en Olula del Río para poner en marcha un proyecto que intuía, podía salir bien. Pasados unos años compró un taller de mármol en Macael para poder dejar ya el alquiler, pero no será hasta el año 1985 cuando creó una sociedad con uno de sus clientes de Málaga, una empresa de la que al final tuvo que hacerse cargo él solo. Y ya, en el 1988 fue cuando tomó la decisión de incorporar a la entidad canteras, porque hasta ese momento la materia prima tenían que comprarla a varios proveedores de Macael. En la actualidad tienen 3 canteras de mármol Blanco, una en el Barranco Puntilla 49 y dos en Rambla Orica, aunque tan solo están trabajando en una, ya que debido a la crisis y a la escasez de pedidos que esta ha conllevado, han tenido que parar dos de las explotaciones.

La agrupación del taller de Macael con la fábrica de Olula de Río se produjo en 1991, cuando se crearon las instalaciones actuales. Un proyecto que pusieron en marcha para adaptarse a las nuevas demandas del mercado y poder trabajar con otros materiales y colores, tanto nacionales como procedentes del extranjero.

A pesar de que fue Gonzalo Esteban el que creó la empresa, en estos momentos son sus hijos los que sostienen el peso de la misma. No obstante él sigue siendo el jefe, y acude todos los días, pero un problema de salud lo ha llevado hasta la segunda fila, eso sí, sin dejar ni un cabo suelto.

Una entidad familiar, en la que los tres hermanos desempeñan distintos puestos. Paco se encarga de las canteras, Robustiano es el que lleva el tema de ventas y Gonzalo es el encargado de la fábrica.

Como una buena entidad con solera, de la comarca del mármol, se dedica a la extracción y la elaboración de la piedra natural. De sus canteras, ubicadas en la sierra de los Filabres, extraen mármol blanco. En estos momentos solo están obteniendo material en Rambla Orica 211, donde explica Paco "trabajan pausadamente, con esmero y siempre esperando a que lo obtenido pueda tener un hueco en el mercado. Lo más costoso es tener que pegarle al monte y hacer todo el despizarre hasta llegar a donde esta la capa de mármol. Por eso vamos despacio, porque no queremos que la extracción, en estos momentos que hay tan pocos pedidos, nos suponga un coste más elevado que la venta del producto".

Además del mármol Blanco de Macael en Gonzalo Esteban comercializan otros productos, que compran en lugares como por ejemplo Turquía. "Trabajamos calizas nacionales, mármol verde de la India, Travertinos de Irán y Turquía, amarillos de Egipto, negro de Malasia y blancos procedentes de Italia y Grecia", explica Robustiano.

Una empresa que ha notado la crisis, como casi todas las que están en la zona, y que cada día se despierta esperando llamadas telefónicas que vayan acompañadas de pedidos, pero por desgracia no es así. En total, entre la fabrica y la cantera, tienen 13 trabajadores, aunque Paco asegura que han llegado a tener más, pero que "han tenido que echar a gente que llevaba poco tiempo, y jubilar a otras personas que tenían ya mucha antigüedad, a través de distintos acuerdos, para que todo el mundo saliese bien parado".

Desde sus comienzos ha sido una empresa que se ha dedicado al mercado nacional, y quizás por ese motivo ha acusado más la crisis que otras entidades que han diversificado su oferta. El fuerte de su demanda lo han encontrado en Andalucía, Murcia y la zona del Levante. Sin embargo desde Mármoles Gonzalo Esteban explican que se han centrado en ese nicho, porque siempre les ha ido muy bien, y que cuando las cosas marchaban mejor " no daban abasto para poder exportar a otros lugares".