Una compañía del Almanzora que se consolida gracias a su apuesta por la diversificación

Diego Gea, define al grupo al que pertenece como "una empresa familiar del Valle del Almanzora que invierte en áreas muy distintas, pero que una de sus prioridades es la de promocionar la zona e invertir en activos de su comarca". Diversificar el capital ha sido una política que ha permitido a esta empresa crecer, y mucho, durante los últimos años. La Bodega Viñalmanzora es su último proyecto, pero paralelamente han puesto en marcha otras iniciativas como la división energética, a través de la cual, se dedican a la generación de energía renovable con una planta solar en el paraje de Cela, en el término municipal de Lúcar.

Empresas de juego, hoteles, cadenas de restaurantes, promoción y construcción, son solo algunos de los sectores en los que este entramado empresarial se maneja desde hace años y al que la crisis, tal y como reconoce Diego Gea, también le afecta. "La crisis nos afecta a todos, mayormente al área de promoción y construcción, pero nosotros no dejamos de invertir y trabajar. En años como estos tratamos de poner en valor los recursos que ya tenemos, trabajamos más que creando nuevas áreas, por fortalecer aquellas en las que ya estamos presentes con una política más conservadora a la hora de reestructurar la empresa".

A pesar de las turbulencias económicas, la sociedad no ha cerrado ninguna de sus empresas, aunque si es cierto que ha tenido sus consecuencias, " no hemos cerrado ninguna empresa, es cierto que hemos reducido, pero ningún área se ha cerrado, incluso la promoción y construcción sigue trabajando aunque a un ritmo mucho más lento. Que duda cabe que el mercado está complicado pero los proyectos siempre se emprenden a medio y largo plazo, se trata de un ciclo de menos producción al que tenemos que adaptarnos".

Con alrededor de 300 empleados directos, el grupo trabaja por seguir generando riqueza en la comarca del Almanzora, y una muestra de ello es la última iniciativa, la puesta en marcha de su propia bodega de vinos. Un proyecto en el que se prioriza la calidad. Con su salida al mercado, esperan ganarse en un principio la confianza de los vecinos del Almanzora y las áreas de influencia turística de la provincia de Almería, sin perder de vista su realidad actual, una bodega de pequeñas dimensiones.

Al mismo tiempo posicionarse y estar presente en lugares como el Salón del Gourmet de Madrid, al que acudía Viñalmanzora hace unos meses. Una presentación en la que algunos distribuidores internacionales ya se interesaron por sus caldos, a pesar de que la producción para saltar internacionalmente es aún limitada. "Nuestra política en principio es seguir trabajando con los viñedos que tenemos y a partir de ahí, mejorar aún más nuestra calidad, convirtiendo los viñedos en ecológicos".