El agua desalada multiplica casi por 3 la producción de sandía frente a la de pozo

Sin el agua no sería posible la vida. Una certeza que en Almería se convierte, además, en un factor estratégico para su desarrollo económico y social. Como continuación al estudio que presentó hace un año la Cátedra Cajamar de Economía y Agroalimentación de la Universidad de Almería, que dirige Francisco Camacho Ferre, titulado 'Captación de datos de campo y análisis para la toma de decisiones sobre el consumo de agua, desalada y de pozos, para el cultivo de tomate', ya están disponibles las conclusiones de nuevos ensayos en otros cultivos, en este caso, en sandía y pimiento. Así lo explicó el director del Centro de Investigación CIAIMBITAL en la UAL, Diego Luis Valera, durante la jornada 'El Agua' celebrada en el marco de Expo Levante, el último día de la feria, quien hizo hincapié en la mayor rentabilidad del uso de agua desalada para el riego de las frutas y hortalizas cultivadas en invernadero frente a la de pozo. "Provoca incrementos de producción, mejorando además la uniformidad en los parámetros de calidad de los frutos. La aplicación de agua desalada contribuye notablemente a la sostenibilidad de los cultivos en invernadero de Almería. Actualmente, a falta de la consecución de otras infraestructuras hidráulicas como los trasvases, es la herramienta más potente para contrarrestar la sobreexplotación de los acuíferos y su alarmante salinización", concluyó.

Además, aportó datos muy reveladores. Entre ellos, que en los ensayos realizados en sandía se ha recolectado un total de 1.398 kilos de sandía Premium (utilizada como polinizador) y 2.752 kilos de sandía Fenway (negra sin semillas) en el tratamiento con agua desalada, mientras que en el manejo con agua de pozo las cifras ascienden a 502 kilos de Premium y 957 kilos de Fenway.

Es decir, el rendimiento de la sandía Premium es 2,78 veces mayor con agua desalada y el de la Fenway es 2,87 superior con este mismo tipo de riego. En términos económicos, los ingresos también rozan el triple, tomando como base los 0,40 euros por kilo del precio de la sandía en la campaña 2014-2015; en concreto, 1.715 euros para la sandía tratada con agua desalada, frente a los 602 euros con la de pozo, 2,84 veces más con la primera. "En cuanto a los parámetros de calidad del fruto, se ha obtenido unos resultados más óptimos en el tratamiento con agua desalada", recoge el informe.

Durante el ciclo de otoño-invierno de la actual campaña, el estudio también se ha dedicado al cultivo de pimiento que se ha recolectado tanto en verde como en rojo. "Los tratamientos con agua desalada han incrementado la producción en 0,6 kilos por metro cuadrado. Tanto para los pimientos rojos como para los verdes, ha habido diferencias estadísticamente significativas (favorables al riego con agua desalada) en el peso y diámetro de los frutos", apunta.

Valera también recordó la necesidad de contar con un precio del agua desalada más asequible para el campo, pues los 0,53 euros por metro cúbico que paga el Campo de Níjar se alejan mucho de los 0,10 euros que pagan los agricultores del Río Adra.