En un mercado cada vez más exigente, la innovación va a marcar las diferencias. Esto no es algo nuevo, es un factor en el que llevan trabajando años las empresas almerienses para ser cabeza de ratón ante los feroces competidores que tiene por delante. La Unión, referente en el mundo de la comercialización de frutas y hortalizas, bien lo sabe y organizó este jueves el I Foro de la Innovación para mostrar diferentes visiones empresariales de la misma temática.

Más de doscientas personas se dieron cita en el Auditorio de la Universidad de Almería para escuchar a diferentes expertos analizar los retos del futuro en temas como tendencias de consumo, digitalización o robótica. Mikel Díez (Director Innovación de IBM España, Portugal, Grecia e Israel) y José Miguel Herrero (Director General de la Industria Agroalimentaria) dieron dos interesantes conferencias tituladas 'Innovación: hacia una nueva etapa de la digitalización empresarial' y 'Combatir el desperdicio alimentario: estrategias y soluciones', respectivamente. Además, hubo dos mesas redondas: 'Nuevas tendencias en el consumo', con Diego Nouet (Country Manager Glovo Iberia), Javier Carmona (Director de Marketing de La Unión) y Nuria Martínez (Directora de la Asociación '5 al día'); y 'Globalización, conectividad y robótica', con Antonio Abad (CTO de Hispasat), Nani Fernández (Directora de Relaciones Institucionales de Orange) y Ramón González (CEO Robonity).

El I Foro de la Innovación convirtió en la mañana del jueves a la provincia en el núcleo nacional del debate y reflexión en torno a las soluciones innovadoras aplicadas a la agricultura para que el campo almeriense mantenga su liderazgo internacional. La UAL, colaboradora junto a la Cámara de Comercio, acogió la primera edición de este evento que nace como punto de encuentro, espacio para la creación de sinergias e ideas con la innovación como protagonista. Retos como la digitalización, tendencias de consumo, competitividad, acciones contra el desperdicio alimentario, globalización, conectividad o robótica, y las sinergias que éstos tengan con la industria agroalimentaria, fueron los temas tratados por expertos de empresas de ámbito mundial líderes en diferentes segmentos profesionales.

El CEO de La Unión, Jesús Barranco, realizó una intervención llena de elementos destacados y buenos ejemplos mediada la mañana, 'Innovar para competir', en la que señaló que “el 70 por ciento del consumo lo llevamos a cabo dentro del hogar”. El 30 por ciento restante “se reparte entre la hostelería moderna, el consumo social y la hostelería tradicional”. En su opinión la gran novedad es la lucha “entre canales de distribución, por el precio, por las gamas y por el tipo de consumo”. “Se lucha también por cuota del estómago. En función del servicio que demos al consumidor final ganaremos o perderemos esa cuota de consumo. Lo hizo el chef Nando Jubany, vendiendo siete millones de croquetas”.

En la presentación de Jesús Barranco quedó claro que “otro reto de nuestra industria es el de avanzar con elementos más saludables en nuestros productos”, por ejemplo mediante probióticos. Y sin duda, el placer. "La gastronomía", destacó el CEO, "cada vez está más en auge. Nosotros para la gama gourmet tenemos 'La Elejida' o 'Shybari', la marca premium de El Corte Inglés".

Mesa redonda sobre ‘Nuevas tendencias en el consumo’.

El CEO de La Unión destacó también el valor de la conveniencia para el consumidor. “Por ello hemos desarrollado y apostado por Long Fresh, el único sistema de congelado de frutas y hortalizas de Europa para comer fresco cuando y donde quieras”. O la decisión de lanzar I’mperfect, para poner en el mercado 40 millones de kilos de producto de calidad pero con un aspecto estético menos lucido. “No nos podemos permitir que un producto como ese se siga desperdiciando”. Por ello, “no podemos competir sólo por precios. La mejor forma de predecir el futuro es crearlo”, indicó Barranco, quien ha puesto en valor la innovación de los canales como por ejemplo haber conseguido que la misión antártica del Ejército de Tierra se haya llevado 2.000 kilos de nuestras hortalizas y frutas congeladas para poder llevar una dieta mediterránea en uno de los últimos confines del mundo”, en referencia al acto que tuvo lugar la pasada semana en Zaragoza.

La apertura de I Foro de la Innovación había corrido a cargo del presidente de Diputación, Javier A. García. que patrocinaba el acto con 'Sabores Almería'. En su intervención, habló del campo almeriense como innovador. “No hay mejor escenario posible para este evento que nuestra provincia y nuestra universidad porque la historia de Almería y del campo almeriense es una conquista marcada por la innovación desde sus mismísimos orígenes. Como innovadora fue la primera revolución de nuestro agro con la creación del invernadero”.

En esta línea, Javier A. García enumeró otros hitos de la agricultura almeriense inspirados por la innovación que han sido determinantes en el desarrollo del sector en la provincia: el riego por goteo, el control biológico, la digitalización o el reto de la marca, fueron los puntos que destacó y que, como resultado, consiguieron que “hoy Almería sea la gran huerta de Europa como resultado del trabajo, sacrificio y esfuerzo de decenas de generaciones. Ahora tenemos que ser capaces de que los consumidores pidan un tomate de Almería y no otro cualquiera”.

El Foro fue clausurado por Sergio Arjona, viceconsejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul

José Miguel Herrero, director general de Industria Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, aprovechó su intervención para concienciar a la opinión pública sobre la importancia del inminente texto legal para evitar el desperdicio alimentario. “Pretendemos que se elabore un plan de prevención del desperdicio alimentario, que se haga un autodiagnóstico para corregir la situación”. El espíritu de la ley no es “el del abuso de multas si no el de adentrarse en un escenario de buenas prácticas”. En su opinión, “existe mayor desperdicio en los hogares que en los restaurantes y eso va unido al criterio de valor que tiene el consumidor por el hecho de tener que pagar la factura del restaurante”. De hecho, según Herrero “los hogares españoles tiran 26 millones de kilos o litros de producto a la semana”, aunque los últimos datos registrados permiten observar una reducción del 8 por ciento del volumen global de desperdicio alimentario.