En los últimos meses, especialmente desde primeros de este 2022, momento en el que la horticultura almeriense elimina a los competidores centroeuropeos para proveer de hortalizas al continente, se ha visto como los precios de las pizarras en las subastas han registrado subidas obstensibles con respecto a las últimas campañas. Es más, esas buenas cotizaciones en origen, y que se podía aludir a que estaban enmarcadas en el mejor momento de la campaña para la venta. Sin embargo, estos precios se han mantenido en el tiempo y continúan aún a expensas de lo que pasará durante la campaña de primavera que ahora comienza a dar sus primeros coletazos.

Venimos de una campaña, especialmente desde enero a esta parte, con unos precios bastante aceptables. Eso es cierto. Sin embargo, tengo que decir que la rentabilidad no lo está siendo tanto. Especialmente en algunas producciones, sobre todo en pimiento, pepino y algunos más van a ser menores pese a esa subida. Después cuando se haga balance de la campaña a su conclusión se hará el balance real, donde se meterá el precio unos insumos que han subido en su totalidad, pero ya podemos adelantar que va a haber casos en los que la rentabilidad sea menor que en campañas anteriores pese al alza que se muestra en las pizarras”, explica Antonio Navarro, presidente de Asaja Almería. Y es que cabe recordar que desde el pasado otoño, meses de octubre-noviembre de 2021, el alza de los esenciales para la actividad agraria no ha parado de subir, generando una complicada ecuación para el agricultor. Además, Navarro asegura que “la rentabilidad en muchas producciones de pimiento y pepino sobre todo, van a ser menores pese al alza. La subida de fertilizantes, agua y prácticamente todo, unido a un descenso de la producción generalizada, que en el caso más paradigmático, que es el del pimiento, van a faltar de dos a dos kilos y medio de rendimiento de media, que es mucho, el margen va a ser escaso. Y manejamos muchos casos de agricultores en esa situación”.

Atendiendo solo a los precios en origen, en el caso del tomate, el precio medio entre todas sus variedades ha visto un incremento que va del 0,76 euros el kilo en la primera semana del mes de enero, a los 1,26 registrados como pico en la semana 11, es decir, un 65% más del 14 al 20 de marzo.

Cultivos como el pimiento o el pepino pueden llegar a tener menor margen

Por su parte, el pimiento, el producto con más densidad en la provincia de Almería ha pasado de los 0,83 euros kilo a los 1,27; registrándose cotizaciones algunos días superiores a los tres euros en la variedad de California Rojo.

Fuentes consultadas a la comercialización y a los representantes de los agricultores, son conscientes de que el parón en el transporte ha repercutido en el alza de los precios, ya que el temor al desabastecimiento de la distribución ha hecho que esta se provea ante una posible larga duración de la paralización en la movilidad. Por fortuna para los productores, solo fue durante un par de días cuando desde la comercialización se les recomendó no cortar por no poder darle salida al producto. Después de ese hecho, las empresas almerienses han ido pudiendo colocar el producto, aunque con trabas.

Eso sí, a estas últimas la huelga sí que les ha afectado en mayor medida, por no haber estado asegurada la libre circulación de mercancías, especialmente, las frutas y hortalizas, dado su carácter perecedero durante varios días.

Además, desde la Federación Andaluza de Asociaciones de Empresarios Comercializadores Hortofrutícolas, Ecohal Andalucía, apuntaron que en los primeros compases del paro: “La situación se agravó al no poder recepcionar los insumos necesarios para la actividad, pues envases y embalajes, tampoco están pudiendo llegar a las empresas de comercialización”. En esa misma línea incidían también desde Coexphal: “No está llegando algún suministro a nuestros almacenes que necesitamos para confeccionar como envases. Esperamos que se normalice la situación”.