Homenaje al son de rancheras
Eran los primeros grandes protagonistas del papel cuché que visitaban el Sicab y la expectación era máxima. Primero llegó Alejandra, muy guapa de malva y rojo. Paseó rodeada de multitud de curiosos y medios de comunicación y, de seguido, se acercó al stand de México -país al que está dedicada esta edición del certamen- donde le esperaba su papá, Bertín Osborne que, fiel amante de la tierra de las rancheras, apadrinaba a su vez la presentación del libro Las charrerías, de Octavio Chávez. Tras ello, el cantante dedicó un improvisado discurso a otro de los presentes, Tomás Terry, quien recibía una mención especial de Loewe por su trayectoria y dedicación al mundo de los caballos. "Él sabe lo imposible que es hacer esto sin presupuesto", comentaba Bertín mientras entregaba al homenajeado un bolso de viaje "Amazona" tan emblemático para la firma de moda promotora del acto como el propio Tomás dentro del salón hípico que estos días se celebra en Sevilla.
Y si bien la prensa quiso felicitar a Osborne por su reciente paternidad, éste, amablemente, evitó pronunciarse. ¿Un silencio motivado, tal vez, por alguna exclusiva relacionada con la cuestión? Posiblemente. Al menos hacia tal razón apuntaban los compañeros de la prensa que, no obstante, sí contaron con la complicidad de Alejandra. "Mi padre, con lo de su niño, está hinchado como un pavo. ¿No lo veis?", bromeaba ante la evidente felicidad del aludido. Por su parte, el artista condecía unas breves palabras a un canal de televisión mexicano donde declaró que, en el tiempo que lleva colaborando con el salón, el actual -en gran medida por el ambiente festivo propiciado por los mariachis allí presentes- se trataba de uno de los que más interés había despertado.
Claro que, el "gancho" mediático del de Jerez, también contribuía. Y mucho. Mientras, su primogénita daba una pista sobre la inminente celebración de las navidades en su hogar. "Nosotros bailamos y bebemos mucho", explicaba la joven. Y, en tono jocoso, prosiguió. "Tengo muchas ganas de que lleguen aunque, para esta ocasión, me toca pasarlas con la familia política". Satisfecha de la maternidad de Santiago, de dos años ya, Alejandra se plantea pronto aumentar su descendencia. "Lo estamos buscando pero, cuando Dios quiera…".
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