Pereza, dúo compuesto por Leiva y Rubén presentó el sábado en Almería los temas de su nuevo disco, Aviones. Dada la expectación creada, hacía varias semanas que se habían agotado las entradas.

Pereza se ha convertido en una de las referencias de la escena musical española y buena cuenta de ello dieron el sábado los seguidores que vibraron durante el concierto y pasaron la velada de pie bailando, con los nuevos temas de su repertorio como Windsor, Violento amor o Pirata.

Llamaba mucho la atención la escenografía de esta gira con lámparas gigantes, cálidas alfombras, luces sugerentes y hasta un telón de terciopelo rojo. Eso dotaba de calidez a una actuación que empezó con mucha intensidad y que acabó con más intensidad aún y con el público volcado con la banda.

Pereza ofreció un concierto de los que hacen historia, puesto que interpretaron 27 canciones, siendo la mayor parte de ellas coreadas por el público que ya estaba gritando y aplaudiendo antes incluso de que los dos madrileños salieran al escenario. El Maestro Padilla vivía una noche de música con mayúsculas, ya que no cabía un alfiler. Regalaron sus grandes temas, aquellos que su público conocía a la perfección y por otro lado casi íntegramente los temas de su disco Aviones.

Arrancó el concierto con Leones, de su último trabajo, y siguió con Como lo tienes tú y Animales sin dar ni un respiro al espectáculo, una tras otra.

Una gran lámpara sobre el escenario presidía la actuación del grupo que entre focos de luces cantaban, mientras que una gran parte del público femenino con móvil o cámara en mano quería inmortalizar la imagen del grupo sobre las tablas del Maestro Padilla.

A lo largo del concierto, Rubén y Leiva dieron en varias ocasiones las gracias a sus grupis de Almería. Y es que notaron el calor de un público que estuvo entregado desde el principio hasta el final. Destacar un solo de saxofón de uno de los componentes de la banda de músicos del grupo en el tema Llévame al baile. No faltaron canciones tan conocidas como Estrella Polar, Beatles en un claro homenaje a Paul McCartney, Margot, Grupis, etcétera.

Ofrecieron dos tantas de bises, dejando encantado al público con la interpretación de Señor Kioskero, con un juego de luces interesante y con una representación de la banda del grupo como si fuesen cuatreros, mientras otros salían al escenario con media en la cabeza y pistola en mano. El concierto concluyó con Superyonquis, que fue solicitada por el público.