Las fachadas de las calles de Abla se llenarán de fotos de 25 artistas
Hasta el 31 de octubre se podrán ver estas imágenes presentadas al III Concurso Internacional de Fotografía Digital
El pequeño municipio almeriense de Abla, ubicado en plena cara norte de Sierra Nevada, decora sus paredes con arte y solidaridad, que vienen de la mano de 25 fotógrafos tanto nacionales como internacionales que han participado en el III Concurso Internacional ArteSOSlidario de Fotografía Digital Abla 2017.
Las 25 obras seleccionadas estarán expuestas en las fachadas de las casas en torno al Mirador de San Antón, que los vecinos han cedido amablemente para el acontecimiento. Las fotos, de temáticas variadas, serán exhibidas en soporte de gran tamaño, y permanecerán expuestas entre los próximos 21 de julio y 31 de octubre. El Mirador de San Antón está ubicado en el barrio árabe que lleva su mismo nombre, un lugar privilegiado del municipio por sus vistas espléndidas de Sierra Nevada, que la mayor parte del año está cubierta de nieve.
La inauguración de la exposición será mañana a las 20:30 horas, en la que también se hará el acto de entrega de los premiados del Concurso, y contará con la participación de representantes de Médicos del Mundo, ACNUR y Oxfam Intermón, ONGs a las que irán destinados los fondos que se recauden, y la actuación de la cantante Sensi Falán a partir de las 22 horas.
La iniciativa, además de popularizar el arte llevando las obras a la calle, tiene además un marcado carácter solidario, dinamiza la vida en el entorno rural, y es sostenible. Hasta un máximo de cinco copias de cada una de las obras expuestas impresas en calidad de bellas artes podrán ser adquiridas a cambio de donativos asequibles a todos los bolsillos. Estos donativos irán destinados a las ONGs (Médicos del Mundo, ACNUR y Oxfam Intermón), que trabajan con los refugiados y afectados de la crisis del Mediterráneo. Por otro lado, en una sociedad excesivamente desequilibrada hacía lo urbano, en ArteSOSlidario se apuesta por el desarrollo del entorno rural, generando actividades socio-culturales que ayuden a generar recursos y entretenimiento.
Finalmente, una vez cumplida su función, los materiales en los que están expuestas la fotografías en las calles de Abla, serán reutilizados para la fabricación artesanal de puff y bolsos por colectivos marginados y desfavorecidos que ayuden además a su integración social y laboral.
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