La Ciudad Deportiva, una imperiosa necesidad

Demasiado se está haciendo de rogar la llegada de la tan ansiada Ciudad Deportiva en tierras almerienses. Algo de lo que se viene hablando desde hace mucho tiempo, antes incluso de la llegada de la primera propiedad saudí a la UD Almería. Esa eterna promesa que parece que nunca fuera a convertirse en una realidad, sin todavía siquiera conocer fecha para la colocación de la primera primera piedra. En pleno 2025, cuesta ver a la UDA como uno de los pocos clubes del fútbol profesional que aún no cuenta con su Ciudad Deportiva. Algo que genera situaciones estrambóticas como las vividas este pasado fin de semana, con el filial rojiblanco disputando dos amistosos a puerta cerrada, uno en el Anexo y otro en el Campo de La Vega de Acá. Algo nada más lejos de la realidad, puesto que en ambos hay puntos desde los que se puede ver el terreno de juego desde el exterior, especialmente en el segundo, por lo que de a puerta cerrada poco tuvo. Aunque volviéndose uno nostálgico uno todavía recuerda como hace no tanto, antes de la llegada de la pandemia, cualquiera que lo desease podía presencia en persona los entrenamientos del primer equipo que tenían lugar en el Anexo, donde sobre todo en fechas vacacionales se plagaban de niños en busca del tan ansiado autógrafo o fotografía de sus ídolos futbolísticos. Algo que muy difícilmente se vaya a volver a repetir con un club habiendo cerrado el Anexo, salvo algunos entrenamientos a puerta abierta para medios, a cal y canto como si en vez de ser una instalación municipal fuera de su propiedad. La Ciudad Deportiva, sin duda un imperiosa necesidad.