La tapia con sifón

Carterilla de azafrán

Le compré a Pepi pan de Felix y me zampé una rebanada con aceite arbe quino de Olealmanzora

Iba yo a comprar el pan -que decía Umbral en sus columnas de El País- a La Tiendecilla de la calle de las Tiendas, y Pepi Velasco me enseña, escandalizada, la etiqueta de una caja de bollitos ultrcongelados. Renuncio a reproducirla porque ocuparía toda la columna y no exagero: me cansé de contar ingredientes cuando iba por cuarenta y me aun me quedaban varias de las once líneas. Desgraciadamente no es una excepción, es uno más de esos panes que se venden "recién horneados" en todo tipo de establecimientos, incluidas gasolineras y quioscos de chuches. Conque le compré a Pepi un pan de Felix, que solo lleva harina de trigo, masa madre natural, sal y agua de Felix osmotizada; y me zampé una rebanada con aceite arbequino de Oleoalmanzora.

Otro producto "simple" como aparentemente son las gominolas, llevan jarabe de glucosa-fructosa, azúcar, agua, harina de trigo, almidón de maíz, dextrosa, acidulantes E-330, E-270, E-296, grasa de palma totalmente hidrogenada, gelatina, correctores de acidez E-331, E-325, aromas, sal, emulgente E-471, conservante E-202 y colorantes E-100, E-120, E-133, E-150d. Esta lista tampoco está a la vista del consumidor, ya que las gominolas suelen venderse a granel y no vemos el envase de fábrica, como en el caso del pan congelado. La he tomado del reciente libro "Guía definitiva para interpretar etiquetas alimentarias", de Juan J. Samper, que actualmente ejerce de inspector de Educación en Almería. Entre estos aditivos hay dos peligrosos, varios que se recomienda usar con precaución y uno natural: la curcumina (E-100), colorante amarillo anaranjado procedente de la cúrcuma, especia muy usada en amplias zonas del planeta. Sin embargo, aquí se tiñen arroces y guisos con ese colorante alimentario que se llamaba "carterilla de azafrán" cuando no estaban obligados a poner en el envase que se trata de E-102 y/o E-110. Están prohibidos en Noruega, Alemania, Austria y Finlandia; afectan a los que tienen intolerancia a la aspirina y a los asmáticos, pueden producir hiperactividad en los niños y ayudan a liberar la histamina, esa que ha saltado a la fama con motivo del fraude del atún. Así que, los que no puedan o no quieran pagar el auténtico azafrán, usen cúrcuma que es barata, da un color bonito, buen aroma y dicen que tiene propiedades anticancerígenas.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios