Fue en 2018 cuando lo conocí. Venía de celebrar el cumpleaños de Chari en el Puerto de Aguadulce y a las 16:00 me había citado en su centro de entrenamiento. Con varios kilos de más y unos pocos kilómetros de corredor popular en mis piernas, le dije que mi objetivo era correr el Maratón de NYC de 2020. Bosus, 'kettlebells', flexiones con conos, escaleras p'arriba, escaleras p'abajo, TRX, tostadas de atún, una pandemia... Cuatro años ya han dado para forjar una gran amistad y hasta para vivir una pandemia juntos. ¡Qué hubiera hecho yo sin sus vídeos tutoriales esos días! Qué panzá sentadillas isométricas con garrafas de agua. Por sus manos pasaron mi peque, mi hermana, mi madre, mi padre y hasta mi mini. Y justo cuando ya veo de fondo de la meta de NYC (quedan dos semanas si Dios quiere, que hasta ahora no ha querido), unos problemillas le han golpeado. Alguien que se ha jugado el físico por bajarle del techo un avión a mi pequeñajo, es un gran tío y se merece tener suerte en la vida. Inma, ponlo a hacer 'burpees' que con nosotros bien que se cebaba.