Que Turki levante la voz en Twitter en perfecto castellano para pedir respeto a los árbitros y que paren ya los errores que viene sufriendo la UD Almería es una verdadera bendición para el aficionado y, todo hay que decirlo, también para la prensa. La de aquí y la de 'Madrid', que abrió hueco grande en sus titulares al mensajito del dueño del club tras el surrealista arbitraje del Leganés. Más allá de la intención última del jeque con el recado dirigido explícitamente a La Liga, es incluso un ejercicio de pura salud mental para el propio Al-Sheikh, que es quien se juega la pasta y a quien un tercer año en Segunda seguramente le haría replantearse seriamente el asunto. Salud mental para el jeque dueño y para el jeque forofo, que, como todos, sufre un partido sí y otro también con el irregular equipo y los nefastos arbitrajes. Y eso a la gente le gusta. Le gusta que el capo salte indignado y dé un puñetazo en la mesa. Yo no creo en conspiraciones arbitrales, ni en planes articuladas para fastidiar a nadie. Supongo que Turki tampoco lo cree, pero hizo bien en protestar. Quizá ya conozca el dicho español de que quien no llora...

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios