NOTAS AL MARGEN
David Fernández
Un milagro por Navidad: salvemos al país
Almería ha vuelto a ser noticia a nivel nacional con motivo de un cartel que ha sido colocado en El Ejido con tintes racistas. Será por los disturbios ocurridos en el año 2000, que El Ejido se haya convertido en un referente de la ultraderecha para reivindicar su postura frente a la inmigración. Tras los sucesos de Torre Pacheco, El Ejido fue el lugar elegido por Santiago Abascal para dar una rueda de prensa contra la llegada de inmigrantes, y la diputada por Almería Rocío de Meer había llamado a la movilización de sus simpatizantes que, dicha sea la verdad, fue un auténtico fracaso con la presencia de una treintena de participantes. Ahora ha sido con un cartel, con lo que VOX ha vuelto a situar El Ejido en el centro de atención contra la inmigración. El cartel fue colocado el pasado miércoles en dos vallas publicitarias ubicadas en dos avenidas principales de la localidad. Elaborado con inteligencia artificial aparecen, a un lado una mujer con el cuerpo cubierto y la cara tapada con un burkan negro. Al otro lado una joven de ojos claros, con el pelo suelto, un vestido de tirantes y una sonrisa en los labios. Sobre la mujer tapada con el burkan aparecen estampados los logos del PSOE y del PP. Sobre la joven destapada y sonriente aparece el logo de VOX. Y en medio, con grandes letras, se nos pregunta a los almerienses ¿Qué Almería quieres? Yo les contestaría a los dos personajes antes citados, Santiago Abascal (un Alavés que no ha dado un palo al agua) y a Rocío de Meer (una madrileña de raíces franquistas), que hubo un tiempo en que por las calles de El Ejido no se veía un inmigrante, entonces la zona era conocida como el Campo de Dalías y contaba con cuatro casas a ambos lados de la carretera y poco más. Con el inicio de la agricultura intensiva en los años 60 del pasado siglo, se necesitaba mano de obra que trabajasen en los invernaderos y empezaron a llegar inmigrantes a El Ejido, sin cuyo trabajo hubiera sido imposible convertir un erial en un municipio cuya calle principal cuenta con un número considerable de entidades bancarias. Gracias a la llegada de inmigrantes el poniente Almeriense se ha convertido en la huerta de Europa. Esa es la Almería que queremos los almerienses que tenemos dos dedos de luces.
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